¿alguna vez pensaron que la princesa de los elfos y un humano con el sueño de ser un héroe se atraerian lo suficiente para tener una hija?, más importante, ¿alguna vez pensaron que esa niña sería tan lista como para desarrollar un hechizo para conoc...
Los ojos color rojo de aquellos monstruos brillaban en la repentina oscuridad, Bell miraba al frente, los pequeños destellos rojos le ayudaban levemente ya que al menos así podía saber dónde estaban sus enemigos.
Sin previo aviso el cuerpo del albino empezó a enfriarse, aquello era señal de el fin de un hora, Bell frunció levemente su seño para después llevar su mano derecha a la bolsa que contenía las nueve pociones restantes.
Tomando una de las pociones el albino la saco de la bolsa, rápidamente la bebió, pronto su calor corporal se empezó a regular, gracias a eso descubrió algo, el piso nevado o al menos así Bell lo título, en si era bastante oscuro, la poción que hedin le entrego tenía una función extra que la dicha.
- visón nocturna ¿Huh?.
Bell no se quejaba, aunque si se le acababan esas posiciones, lo cierto es que el tendría un gran problema, ahora le quedaban nueve horas y el las aprovecharía.
Fijó su mirada al frente, sorprendentemente los enemigos aún no se movían, ¿Acaso ellos también estaban pensando algo?, La idea no se descartaba, Bell dudaba que fueran tan amables como para dejarlo tener su monólogo interno.
Aparentando sus dagas Bell afiló su mirada, los monstruos tomaron esa acción como una provocacion así provocando el inicio de la batalla.
El primero en atacar fue el enemigo, una velocidad superior a la de aiz fue la que Bell tuvo que enfrentar, el puño de aquel gorila iba hacia su pecho, Bell logro cubrirse colocando sus brazos enfrente de el, aunque la velocidad era superior lo cierto es que la fuerza era soportable, pero eso no quería decir que aquel golpe no le doliera, Bell retrocedió ante aquel ataque, apretó la empuñadura de su daga y dió un tajo, desafortunadamente el ataque no conecto y en cambio recibió un fuerte golpe en su cadera, Bell fue mandado a volar, en el aire recompuso su postura y se volvió a preparar para la pelea.
Extendió su mano y aquel círculo mágico de color rojo apareció, el Firebolt que antes era una gran llamarada ahora se torno en un gran océano de fuego que derritió el hielo y nieve debajo de sus pies, el fuego cubrió a los 13 monstruos y cuando se disparcio solo logro ver cuatro gemas color violeta, era un buen resultado, con un solo ataque logro acabar con cuatro de ellos, más lástimamente el enemigo aprendia y cuando menos de lo espero uno de los tantos monstruos apareció enfrente de el.
Bell apenas logro cubrirse, sus instintos le advirtieron de un enemigo a sus espaldas, se apoyo en el piso hecho de nieve y huyo unos cuantos metros, logro sentir el aire que alboroto su cabello, el volteo para ver a su enemigo pero solo logro ver unos ojos color rojo, su abdomen dolió como el infierno, un golpe bien conectado lo volvió a mandar a volar, no pudo recomponerse ya que en el aire lo volvieron a golpear, salió proyectado hacia un destino desconocido, quiso reponerse pero nuevamente un golpe lo saco de su concentración, eso se repitió más de una vez, aunque Bell no se diera cuenta, lo cierro es que aquellos monos solo lo ultilizaban como una pelota.
Por alguna razón su orgullo se quebró, Bell emepezo a dudar de su capacidad, ¿Está era la velocidad de un nivel seis?, Bell se sentía abrumado, enfrente de el apareció un monstruo que le golpeó la cara repetidamente, después su abdomen volvió a ser golpeado fuertemente, Bell de sintió humillado.
Uno de los monstruos lo tomo de su cráneo y dejo que su cuerpo colgará, Bell lo miro, aquel desgraciado parecía estar burlándose de él.
Escondidos en la salida del piso 41, hedin miraba a Bell junto a los otros ejecutivos.
- lamentable...
Hedin expreso con asco puro en su lengua.
- no lo entiendo, el pudo contenernos a nosotros... ¿Por qué no puede con unos simples monos?.
Allen hablo con confusión, sus palabras carecían de mentiras, el albino pudo retenerlos bastante tiempo para su nivel, ¿Por qué no podía siquiera retener a esos lamentables monstruos?.
La incógnita se planteo, aunque nadie sabía la respuesta.
- ¿Tal vez por qué trataba de proteger a su amigo herrero de allen-sama y Gulliver-sama?.
- ¿Huh?.
De la nada una chica de cabello color blanco y ojos azules hablo, hedin la miro, se trataba de una nivel inferior, si no recordaba mal una nivel tres.
- ahora que lo dices... ¿Meika cierto?.
- si hedin-sama.
- como tú dices, tu teoría no carece de razón, Bell cranel aunque peleó con Allen y los enenos... El siempre trato de proteger a su amigo.
La vista de hedin se fijó en el herrero.
- dime pequeño insensato, ¿Crees capaz a Bell cranel de salvar a alguien desconocido?.
- bueno...
Welf sabía que se refería a el, pero no quería responder, el sentía que algo malo sucedería.
- si lo creo...
- perfecto.
Aunque aún así el herrero respondió, hedin sonrió arrogante, sin decirle nada tomo del cuello de la camisa a la chica y la aventó sin decir una sola palabra más que "dile que te separaste"
La chica logro ver cómo su ejecutivo se alejaba cada vez más de ella, pronto sintió el frío cubrir su espalda, la chica hacia caído en el frío océano de agua que el albino habia creado con su hechizo.
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Ella no tenía armas, se sintió traicionada, aunque realmente la caída no la afectó en su físico, tenía frío, eso era inegable, pronto se puso de pie y cundo levantó la vista uno de esos monstruos la miraba directamente.
Sintió el miedo recorrer sus venas, el frío no ayudaba.
A lo lejos Bell logro ver caer algo al agua, presto más atención y logro notar que se trataba de una persona, ¿No estaba solo?, El pensó, pero rápidamente nego esa idea, la sola presencia de ese ente humano descartaba la idea, miro a su enemigo, una especie de poder nuevo llenaba su alma.
- es todo.
El susurró mientras en su mano el mismo círculo mágico color rojo aparecía.
- Firebolt ..
El susurró fue dado, el monstruo murió gracias a las llamas soltadas por el mismo infierno.
Sus pies se reafirmaron en el piso, miro al frente, solo quedaban ocho y uno de ellos iba hacia lo que el consideraba un humano.
Corrió con una velocidad que no había demostrado antes y dió una patada al monstruo, el enemigo salió proyectado y al chocar con una pared de hielo este se disolvió en humo, quedaban siete, la chica lo miro y ella solo podía ver....
Un héroe...
Ahora empezaba la verdadera pelea.
¿Les gustó el capítulo?.
¿Alguna recomendación?.
Siguiente cap: una masacre.
BYEEEEEEEEEEEEEEE
Nuevamente se que son cortos los caps, pero le esfuerzo, al menos dejen su voto :'3
