un problema para dos

lágrimas.

Suspiré, enfrente de mi estaba el cadáver degollado de mi enemigo, su cabeza estaba a unos metros de mi, la espada con la que fue asesinado estaba siendo sostenida por mi mano dominante, la sangre de mi enemigo corría en el filo de mi espada.

Mis ojos carente de sentimientos miraban su cuerpo, la sangre salía del tronco de su cuello para después deslizarse hasta su pechera.

Lo sabía, prometí no ser como el pero aún así me deje dominar por la venganza y le vendí mi alma a la oscuridad.

Ahora era fuerte pero renuncie a mi humanidad para obtener está fuerza, ¿Era merecedor de ella?, No lo sabía, lo único que sabia era que mis hijos habían sido vengados, aunque, ¿Ahora que seguía?.

Me hice esa pregunta aunque la verdad dejo de tener importancia hace mucho, mi conciencia solo se centraba en matarlo y ahora que lo había logrado no sabía que hacer.

- luxion... ¿Que me recomiendas hacer?.

A falta de ideas le pedí su opinión a el objeto mágico que colgaba de mi cuello.

- [si me deja dar mi opinión, creo que sería bueno que descansará y hablara de sus problemas con alguien, en otras palabras que pida ayuda].

- [creo que luxion tiene razón amo, su estado físico y mental estaba en un estado deplorable, lo mejor es pedir ayuda].

Cleare dió su opinión, me sorprendió un poco ya que ella no había hablado en estás últimas semanas, aunque agradecía su preocupación y también la de luxion, lo cierto es que no me sentía merecedor de recibir la ayuda de alguien, después de todo sucumbí ante mi propia oscuridad, no merezco la piedad de nadie.

- me niego... Estoy bien... Yo puedo solo.

Por esa razón decliné ante las palabras de cleare y luxion, curiosamente pude sentir la molestia de ambos al rechazar sus ideas.

- [amo, su estado no es el mejor, si sigue así lo que pasará es que morirá].

- está bien... Si muero busquen un amo que pueda usarlos para algo mejor.

- [¡amo tonto, nadie más nos puede usar más que usted, si muere solo quedaremos como unos objetos de joyería¡].

Me sorprendió un poco el arrebato de cleare, podía notar que ella tenía sentimientos, puede que luxion también lo tuviera y gracias a eso ellos se preocupaban por mi, me sentía algo feliz aunque no sea merecedor de su amabilidad.

- gracias por preocuparse... pero enserio, estoy bien, solo necesito un poco de descanso.

- [amo, literalmente tiene tres costillas rotas, su brazo derecho tiene varios tendones desgarrados, sus ojos tienen varios derrames oculares y para rematar su nivel de adrenalina es bastante alta, es un milagro que no le haya dado un infarto].

Luxion fue el que hablo en contra de mis palabras, yo sabía el estado de mi cuerpo, mis piernas rogaban por descanso mientras mi cuerpo gritaba por tratamiento pero no podía mostrará debilidad en este momento, ¿La razón?.

- está bien, ya no soy débil... Yo puedo solo.

- [amo terco...].

Cleare hablo mientras se tragaba sus propias palabras, ella estaba preocupada por mi, su amo, pero no podía aceptar sus palabras ya que decidí no mostrar debilidad ante nadie.

Es por eso que negaba su ayuda, cualquier tipo de ayuda que recibiera era una forma de demostrar debilidad o al menos eso pensaba.

Cleare ni luxion podían hacer algo en contra de ello ya que al final de cuentas no podían desobedecer mis órdenes.