platica entre familia

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ambas divinidades, loki y hestia no sabían que pensar, las palabras de la pequeña semi elfa no carecían de verdad, mas ninguna de las dos quería admitirlo, el bar que siempre acostumbraba a ser ruidoso y lleno de vida ahora solo estaba en silencio absoluto.

- por cierto papa, ¿no esta aquí la tía freya?.

loki se quedo en shock al oír el nombre de aquella diosa, la moyoria de aventureros se quedaron mudos y uno que otro se ahogo con la bebida que estaba bebiendo, con la expresión shokeada loki miro a esmeralda, la diosa quería creer haber escuchado mal las palabras que la pequeña dijo.

mas sin embargo alguien respondió de forma diferente, syr una de las camareras que el bar tenia dejo caer un vaso que estaba limpiando, la mayoría la miro debido al ruido que provoco.

- ¿syr?... ¿estas bien?.

amablemente bell se acerco a su amiga mas esmeralda fue detrás de el, la camarera miro a la infante, esmeralda le devolvió la mirada, los ojos heterocromicos de la descendencia cranel y ljos alf miraban los ojos color gris de la chica.

- bueno... esto si que es una sorpresa.

- ¿esmeralda?...

-¿que pasa papa?.

bell nombro a su hija algo extrañado, ¿a que se refería la pequeña semi elfo?, el albino no lo sabia pero aun así quería respuestas.

- ¿por que dijiste aquello?.

- bueno, digamos que su mirada tiene... un toque divino.

esmeralda sonrió astutamente, syr se quedo callada y solo la miro.. mas sorpresivamente bell le dio una leve palmada en la cabeza a su hija, confundida la infante lo miro.

- ¿papa?.

- no intimides a la gente, ¿acaso no te enseñe eso?.

esmeralda parpadeo unas cuantas veces para después sonreír, con ambas manos atrapo la mano de su padre para después llevarla a su mejilla, como un instinto el albino acaricio levemente la mejilla de su hija.

- si, tu me enseñaste a ser alguien de buen corazón... después de todo eres el héroe de la ciudad, héroe de mi mama y por supuesto también nuestro propio héroe.

esmeralda sonreía alegremente mientras disfrutaba del tacto de la mano de su padre, aquella escena era vista por todos y nadie se atrevía a interrumpirla, riveria, una de las que veía aquella escena solo podía observar pues no estaba segura si acercarse era lo correcto.

- sigues siendo igual de indecisa mama.

el pequeño semi elfo se acerco a su madre, riveria lo miro ya con una mirada mas calmada.

- onix, ¿verdad?.

- sip, es el nombre que tu me diste.

- ¿yo, por que?.

onix se encogió de hombros.

- realmente no lo se con exactitud, mas siempre me contabas que mi nombre venia del abuelo, eso es todo lo que se.

- entiendo...

riveria se quedo en silencio, ella no entendía el por qué de las palabras de su hijo, ¿Por qué es que ella en un futuro relacionaría el nombre onix con su padre?.

La alta elfa se quedó en silencio, tarde pero cayó en cuanta... ¿Por qué ella estaba aceptado que aquel niño era su hijo?.

Riveria no lo sabía pero al final era un sentimiento que no le desagradaba.

- entonces... ¿Cuál es tu comida favorita?.

Al final riveria lo acepto y queriendo conocer más a su hijo, la alta elfa hizo aquella pregunta.

un problema para dosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora