El caballero Blanco
Terminó de desayunar con el emperador sobre el mediodía, aún guardándose lo que escuchó sobre qué alguien le enviaba cartas a la emperatriz. Y ella parecía expectante de estos mensajes. Podría ser malinterpretado esto y arruinar su vida, pero Aurora no haría eso. Su consciencia no se lo permitía sin antes hablarlo con ella, especialmente por la amistad que una vez que tuvieron. En honor a los años de amistad que compartieron. No le haría algo tan sucio.
Al regresar a su dormitorio y tras arreglarse para aquel día, ya que tendría que ir a la Compañía de Mensajería además de hablar con la emperatriz. Tenía que comunicarse con Alister, sobre el encargo que le impuso la última vez. Era difícil ciertamente y ella no veía como Heinrey fuera a sacar un guerra de repente. Y sus espías en Occidente, magos que le eran fieles a ella, le decían que Heinrey mandaba a construir a espaldas de su hermano. Todo tipo de armas de guerra. Y eso le decía, que el rey Waldon II de Occidente no apoyaba los ideales de su hermano menor que era muchísimo más ambicioso que él.
Además tampoco es que pudiera hacer algo, estaba destinado a una vida de cama de por vida. La enfermedad que poseía hace años, le había llegado factura. No debería de haber vivido tanto tiempo, pero así lo hacía.
—¿Lucian?
—Lady Aurora, he sido asignado como su espada juramentada.—comentó el duque con orgullo.
—Será un placer, dime, ¿Tú juras el mismo juramento que los otros guardias?—tenia mucha curiosidad por eso. Ya que no sabía exactamente de cómo se había encargado de este asunto, Sovieshu. Quien tampoco le gustaba la cercanía que tenía con Lucian.
—Hablando libremente, si.
Ella lo miró.
Conocía el juramento que hacían los caballeros que querían formar parte de la antigua Guardia Real, la cual eran los responsables de la seguridad de la Familia Imperial. Y ese tarea, podía ser el mayor honor en la vida de alguien. Ya que dedicaban su vida entera, literalmente, a la protección y seguridad de la Guardia Real. Entre las cosas que juraban eran: proteger con tu vida a los miembros de la Familia Imperial; no tener hijos; no ser dueño de ningunas tierras; no tener títulos; dedicar su vida a este objetivo. Y sobretodo, no casarse.—¿Eres consciente de lo que has abandonado, cierto? No quiero que te arrepientas de esta decisión, es un juramento sagrado irrompible. A menos que claro, quieras despertar la furia de los antiguos dioses.
—Si lo soy, no te preocupes de eso. Nadya será la que se encargue de todo en el ducado.—comentó.—Yo estoy aquí para pagar mi deuda contigo.
—Lo siento de antemano.—dijo Aurora.—Bueno, tengo que ir al pueblo un momento, exactamente a la Compañía de Mensajería. Le daremos una visita a un conocido mío.
|•••|
Pronto llegaron con el carruaje a la Plaza de Helenia, llamado así en honor a una de las diosas antiguas que adoraban antes del nuevo Dios. La Divinidad de la "Creación", así fue nombrada en los textos antiguos que se podía encontrar por todo el continente. Irían caminado hasta la Compañía de Mensajería, ya que estaba tanto cerca y en un callejón por el cual el carruaje no podía pasar.
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𝐋𝐀 𝐎𝐓𝐑𝐀 𝐀𝐌𝐀𝐍𝐓𝐄 ✅
Fanfiction𝐋𝐀 𝐎𝐓𝐑𝐀 𝐀𝐌𝐀𝐍𝐓𝐄 ||| ʟᴇᴅ ғᴀɴғɪᴄᴛɪᴏɴ ❝ ¿Y si Navier en un último intento de quitar a Rashta del corazón del emperador Sovieshu, hace que otra mujer sea su amante también? ❞ 𝐬𝐨𝐯𝐢𝐞𝐬𝐡𝐮 𝐱 𝐨𝐜 𝐧𝐚𝐯𝐢𝐞𝐫 𝐱 𝐡𝐞𝐢𝐧𝐫𝐞𝐲 → La empera...