𝐋𝐀 𝐎𝐓𝐑𝐀 𝐀𝐌𝐀𝐍𝐓𝐄 ✅

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Cartas de un amor II
"La emperatriz loca"

sovieshu's perspective

Espere por unos quince minutos hasta que Lady Rhaella trajo a las otras dos damas de compañía que tenía la emperatriz a su cargo en el momento del incidente, las interrogué por separado a las dos, me dieron la misma versión de evento que Lady Rhaella. Incluso me dijeron cómo Rashta empezó a gritar "¡Aléjenla de mi a ese bebé muerto! ¡Aléjenla de mi, esa no es hija mía!" Realmente pensé en ese instante que su locura y crueldad no tenía límites. Había mostrado muchas pistas de ello anteriormente, por ejemplo, el trato que él daba a los criados, su pasado esclavo, la ostentación natural suya y su manipulación. De la cual no me di cuenta hasta que Aurora me lo empezó a decir. Quise pasarlo por alto porque quise legitimar a Glorym, y necesitaba quedarme con Rashta durante un año. Pero ahora eso ya no sería posible, porque yo no estaría casado con una mujer que además de no ser apta para el puesto de emperatriz, casi mata a su propia hija.

—Prepararé unos aposentos al lado de los míos para la princesa Glorym, usted, Lady Rhaella será la niñera de la princesa. Le pido que cuide y proteja a la princesa Glorym.

—Por supuesto su majestad, será un honor.

—Parece que se ha dormido la princesa.—dije mientras se la entregaba a Lady Rhaella, con cuidado para no despertar a la recién nacida. La bebé lucía tan calmada y tranquila, no sabiendo lo que estaba pasando a su alrededor. Con la princesa en brazos, Lady Rhaella se retiró.

—Tengo que presumir que empezarás el proceso de divorcio, ¿o me equivoco yo?

—No te equivocas, Rashta nunca fue apta para ser emperatriz, ojalá haberme dado cuenta de eso antes cuando me avisaste.—dijo suspirándo.—Voy a tener unos días largos.

—Te ayudaré en lo que sea, míralo como una cortesía de mi parte por nuestros años de amistad.

—Así lo veré.

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aurora's perspective

Al día siguiente del incidente de la emperatriz con la princesa, todo el mundo en el palacio imperial había comenzado a correr el rumor de que la emperatriz había enloquecido porque tenía mucho celos de Sovieshu o yo; también porque la princesa Glorym era una niña y no un niño. Eso causó que la reputación de Rashta, que ya era baja de por sí, cayera aún más en picado. La gente de la Corte usaba los adjetivos "cruel", "despiadada" y "enloquecida" para describirla. Además de que la llamaron como "La emperatriz loca" debido a este incidente. Y muchos otros que tuvo con una larga diversidad de criados y sirvientes que estuvieron a su servicio. Era sorprendente que hubiera llegado tan lejos con esa actitud prepotente e impulsiva que tenía.
Sovieshu fue demasiado generoso con ella solamente porque le daría una hija.

—Su majestad.—dije mientras me reverenciaba.

—Aurora, pasa, parece que va a ser lo único que va salir bien en mi día.—comentó, con un tono que me transmitía una sensación de cansancio por su parte. Quizás se quedó hasta tarde con los documentos del divorcio.

—Pues me alegro, solo quería saber si el Ministro Héctore ha traído los documentos de diplomacia.

—Justo me los acaba de dar, realmente solo necesitaríamos una firma tuya en este documento. Y todo estaría listo para que partieras en dos días.

Él me dio una pluma con tinta y yo firmé aquel documento sin preocupaciones, esta sería la última cosa que haría personalmente para Sovieshu. Yo debería de recordar quién era realmente y cómo no debería de someterme al poder de ninguna persona. Siendo yo una con más poder e influencia que muchos reyes u emperadores. Pero al mismo tiempo, no podía evitar sentir lo que sentía por Sovieshu. Durante años traté de borrar y evitar lo que sea que fuera esto, sin embargo, volvían cada vez y más fuertes y difíciles de controlar.

—Supongo que este será un adiós temporal, cuando vuelva, ya nos diremos adiós apropiadamente.—le dije mirándolo a los ojos, él parecía ya haber hecho paz con el asunto de no querer renunciar a mi libertad.

—Entonces, espero que ese día no llegue nunca.

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sovieshu's perspective

Los dos días se pasaron volando y en nada ella ya había partido para emprender su viaje hacia el Reino del Norte, como representante del Imperio Oriental. Me comentó también que en la ida haría una parada en el Ducado Dagmar para ver a su hermano mayor, el duque Elián, y después en la vuelta, haría una vuelta pasando por el Reino de Occidente. Así visitando a Navier y a Heinrey. Pensé que era una buena idea también. Nos servía de igual manera para pensar sobre nuestra relación y cual era el futuro que queríamos, la amaba demasiado como para atarla a un destino que sabía que ella no quería. Claro que quería que Aurora fuera mi emperatriz y algún día formáramos una bonita y gran familia, pero ella no quería eso al amar demasiado su libertad. Algo que pocos poseían en estos días y la comprendería, yo haría absolutamente lo mismo.

—Su majestad.—me saludó el Marqués Karl mientras se reverenciaba ante mí.

—¿Sucedió algo Marqués Karl? No se ve en buenas condiciones.—dije al verlo nervioso claramente.—¿Deberíamos continuar la conversación en mi oficina?

—No será necesario su majestad, acaba de suceder un incidente en los aposentos de la emperatriz Rashta.—dijo, y tragó saliva.—Ella cuando las sirvientas le traían la comida, cogió el cuchillo y empezó a amenazar a las sirvientas. Para luego, clavárselo en el cuello, llamaron de inmediato al médico de cabecera, pero fue demasiado tarde. Había pedido mucha sangre y no se pudo salvarla, su majestad, lo lamento.

—Es algo triste.—musité, sentía un poco de pena por esa mujer pero no tanta porque atentó contra la vida de su propia hija.—Entiérrenla junto con los demás en el cementerio cercano, no con la familia imperial, esa mujer no se lo merece después de lo que hizo.

"La emperatriz Rashta sería recordada como la peor emperatriz que tuvo Oriente y se le apodó como la "Emperatriz Loca" debido a su actitud que se rumoreó que tuvo los últimos día de vida."