CAPITULO 30

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Camila POV


Mi día no podía ir mejor.

Sin dudas Lauren continuaba siendo mi ángel de la guarda. Se había aparecido como si de magia se tratara. De un momento a otro estaba en mi puerta y ahora me tenía entre sus brazos, mientras yo descansaba mi cabeza en su pecho. Su corazón era lo mas semejante a una estampida de caballos; latía al igual que el mio cada vez que esos ojos verdes se posaban en mi.

Estaba intentando no llorar, pero la situación no ayudaba.

Habían pasado tantas cosas en el día que apenas podía procesar que la madre de Lauren era la misma señora que había conocido un día normal en el parque.

En un solo día, había conseguido empleo, un colegio para mi hermana y había vuelto a ver a Lauren.

Nada podría salir mal ¿No?

- No puedo volver a perderte Camila - exclamó la ojiverde mientras me apretaba contra su cuerpo.

- No me des razones para hacerlo - pedí aun recostada contra su pecho.

Por un momento nos inundó un silencio, que nos permitió procesar las palabras que habíamos dicho.

Luego de unos minutos, Lauren aflojó su agarre y me soltó. Cuando levanté mi rostro y la miré a los ojos, pude ver algunas lagrimas caer. Así que pasé suavemente mi dedo pulgar por sus mejillas intentando capturarlas; haciendo que la ojiverde sonriera tiernamente y dejara un beso en mi frente.

-Será mejor que volvamos - dijo Lauren pestañeando un par de veces.

-¿Dónde será la fiesta? - pregunté comenzando a caminar fuera del salón.

- La fiesta será en la plaza. Mamá contrató algunos juegos para los niños y Pupe se ofreció a preparar algunos aperitivos - Lauren caminaba a mi lado contándome sobre los preparativos de la fiesta, mientras en mi mente no dejaba de resonar algo.

-Lauren... - dije con dudas, pero necesitaba respuestas.

-¿Si? - preguntó mientras se detenía en la entrada del Colegio, sosteniendo la puerta para mi.

-¿Por qué no me dijiste que tu apellido era Jauregui cuando nos conocimos?

El rostro de Lauren pasó de tranquilidad a uno de sorpresa en pocos segundos.

-Mmm ¿Podemos hablar sobre esto luego? - preguntó tragando con dificultad.

Estaba segura que Lauren ocultaba algo, de lo contrario no se hubiera puesto tan nerviosa cuando hice la pregunta, o simplemente me hubiera dado una respuesta en el momento. No estaba segura como tomarme el hecho de que estaba evitando entrar en ese tema, y me ponía mas nerviosa aun.

-Esta bien, pero tendremos esa conversación, porque necesito respuestas. - le dije totalmente decidida, con un tono de voz firme.

- Y las tendrás, lo prometo. Pero ahora olvidemos todo eso y disfrutemos de la fiesta ¿Si? - y no pude discutir sobre ello, cuando Lauren me sonrió y sus ojos verdes parecieron brillar.

Bajamos los escalones que nos dejaban en la acera y cruzamos hacia la plaza. Estaba lleno de niños por todos lados; algunos corrían de un lado a otro, otros jugaban con la pelota y otros tantos estaban en los juegos que Clara había encargado, tales como un pelotero y dos camas elásticas.

Sin dudas era una de las mejores fiestas de cumpleaños que había visto.

-Camz, iré a buscar mis pinturas ¿Vienes conmigo? - preguntó Lauren.

Sabor a almendras -Camren-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora