Cuando Xu Cheng Yan recibió la llamada, ya eran altas horas de la madrugada.
── Ven a recogerme, ──dijo la persona al otro lado del teléfono, con la voz un poco ronca, mientras se escuchaba un bullicio de fondo. Después de decir eso, el hombre simplemente colgó el teléfono.
Pasados unos segundos, Xu Cheng Yan recibió un mensaje de ubicación, el cual mostraba el lugar a donde debía dirigirse: un bar local.
Resistiendo las ganas de volver a dormirse, se levantó de la cama, se vistió y tomó las llaves del coche antes de salir apresuradamente. Aunque el invierno había pasado hacía poco tiempo, afuera se sentía frío, por lo que Xu Cheng Yan se envolvió en su abrigo y subió al coche.
Recorrió con rapidez el camino hasta su destino y a pesar de ser la una de la madrugada, la calle central seguía animada y con las luces de las tiendas encendidas por todas partes. Llegó al bar y en medio del bullicio, habilidosamente, se abrió camino entre la multitud con rumbo a la sala privada. Al llegar a ella, abrió la puerta y de inmediato vio en el centro al hombre que buscaba, quien estaba rodeado por varias personas.
La luz en la sala era tenue y caótica, y allí, un grupo de jóvenes elegantes estaban sentados juntos bebiendo, mientras que el hombre al que vino a buscar, yacía en el centro del sofá apoyado, despreocupadamente en el respaldo y agitando un vaso de bebida que sostenía en su mano.
De repente, el hombre pareció darse cuenta de algo y levantó la cabeza mirando hacia la puerta y reconoció a Xu Cheng Yan. Las personas en la sala también notaron aquella figura y comenzaron a animarse gritando: ── ¡Aquí viene Yan Yan!
── ¿De verdad ha venido? ¿A pesar de la hora?
── Ya lo creo que sí, después de todo, fue el propio Sr. He quien llamó, por supuesto que Yan Yan vendría.
El grupo de muchachos bromeaba y miraba hacia el hombre en el centro del sofá, el mismo que echó un vistazo al joven de cabello negro en la puerta. Colocó su vaso en la mesa y dijo a los demás: ── Es hora de irme.
── ¿Eh? ¿El Sr. He realmente se va? ── Dijo uno de ellos.
── ¿No te quedas a tomar unas copas más? ── Dijo otro.
Ignorando los comentarios a su alrededor, el elegante hombre simplemente caminó al exterior de la sala privada y, debido al calor que se sentía dentro del bar, se soltó casualmente la corbata.
Una vez en el coche, se recostó en el respaldo, cansado, con los ojos cerrados.
Xu Cheng Yan, se acomodó en el asiento del conductor y se acercó a 'él para abrocharle el cinturón de seguridad y notó que tenía las cejas fruncidas. De tan cerca que estaban, Xu Cheng Yan podía percibir el fuerte olor a alcohol que desprendía su acompañante, por lo que susurró suavemente: ── Si al señor no le gusta, la próxima vez no beba tanto.
El hombre permaneció con los ojos cerrados y no reaccionó ante el comentario del joven, parecía que se había quedado dormido en ese mismo instante y por eso no escuchó nada de lo que se le dijo.
No fue hasta que el automóvil se detuvo frente al apartamento que el copiloto finalmente se despertó.
Ya en el interior, He Yang se quitó el abrigo y lo arrojó descuidadamente en el sofá. Xu Cheng Yan lo observó y se acercó para colgar la chaqueta lanzada al sofá en el perchero que estaba justo a un lado.
Una vez dejada la prenda en su sitio, caminó a la cocina y dijo: ── Señor, prepararé sopa── Haría un caldo especial para desintoxicar del alcohol al Sr. He de la borrachera que traía.
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El sustituto
RomanceHe Yang considera a Shen Xiuzhu como una persona especial en su vida, alguien que ha sido su salvador y que brilla como una luz blanca de luna en su corazón. Por otro lado, Xu Chengyan ha estado enamorado de He Yang durante cinco años, pero se perci...