Omega Controla a Alfa | Markhyuck

70 | Como si fuera un sueño...

La casa de Donghyuck era más casa del resto que del propio Donghyuck.

Las vacaciones estaban por terminar y debían volver a clases pronto, pero parecía que Renjun y Chenle no querían salir de ahí. Incluso los alfas iban de visita seguido, incluido Jaemin y su hermana cada que podía salir del hospital.

No es que le molestara; Donghyuck disfrutaba pasar tiempo con sus amigos ahora que las cosas estaban bien, es sólo que ya no tenía más espacio para meter más gente y tampoco tenía mucha pila social.

— ¿Qué ustedes no tienen casa propia? —miró a Jeno con el ceño fruncido mientras lavaba unas verduras,— Se fueron hace poco y volvieron de nuevo ¿Seguro que tienen casa y no viven en la calle?

— Nos fuimos porque era el celo de Mark hyung —respondió con un puchero,— Además nos gusta venir aquí...

— Hey, también me gusta que me visiten, pero se están pasando de la raya —se rio,— Esta tarde llega Jaemin y su hermana y no sé dónde mierda los voy a meter. Nunca los había tenido a todos juntos...

El resto de los chicos estaban en el patio intentando armar una piscina plástica donde entraran las ocho humanidades que estarían en la casa. Jisung se había puesto unos lentes de agua y empezó a pasearse como si fuera modelo, haciendo reír a su novio. Renjun miraba las instrucciones demasiado confundido, no le entendía mucho al inglés y no sabía donde iban esas piezas metálicas que tenía en su mano.

Jeno y Donghyuck miraban todo desde el ventanal de la cocina, se habían ofrecido a hacer el almuerzo de ese día. Mark se había cansado de ayudar afuera, así que decidió entrar y hacerle compañía a los otros dos.

— ¿Te importa si tú sigues revolviendo las ensaladas? —Jeno le habló al peliverde, entregándole la bandeja,— Iré a ayudar a Renjun, se ve que está a punto de matar a los chicos por no hacerle caso.

Casi salió huyendo de la cocina, dejando el ambiente tenso entre Mark y Donghyuck.

El silencio los empezaba a abrumar. A pesar de que su lengua picaba por entablar una conversación, el alfa decidió mantenerse en silencio mientras aliñaba las ensaladas y las dejaba sobre la mesa, ahora observando minuciosamente al moreno frente a él. Donghyuck le daba la espalda, mirando por el ventanal a los chicos que con mucha dificultad armaban la piscina.

Mark se sentía muy, pero muy ansioso. Tenía muchas ganas de acercarse al moreno y hablarle, quería abrazarlo delicadamente y dejar un beso sobre su cabello morado. Mark Lee ¿En qué estás pensando?

— Mark, hasta acá me apesta tu olor —Donghyuck se quejó, frunciendo la nariz,— ¿Qué mierda te pasa?

Donghyuck dejó de lado el cuchillo, acercándose a la llave de agua para poder lavarse las manos rápidamente y voltearse a mirar al alfa que seguía sentado.

— No has respondido mi pregunta.

— No sé de qué mierda estás hablando —el moreno hizo el amago de irse, pero la mano rápida de Mark lo detuvo,— Suéltame.

El peliverde se levantó de su asiento, sosteniendo la muñeca de Donghyuck con un poco más de fuerza. Lentamente la fue moviendo hasta que sus dedos chocaron con los contrarios, empezando a entrelazarlos con delicadeza.  Mark miró sus manos entrelazadas, sonriendo a la vez que levantaba su cabeza para poder mirar los ojos del moreno.

Donghyuck no se sentía mejor. Quería salir huyendo, sentía como su mano empezaba a transpirar y no quería apartar sus ojos del suelo. Sabía que Mark lo estaba mirando y es que ¡Vamos! Cualquiera se da cuenta cuando te miran intensamente.