Estábamos tomando un desayuno familiar por primera vez en muchas vueltas.
Saku le contaba a su madre cosas de su infancia. Y ambas sonreían felices. Itachi se había unido con anécdotas de cuando éramos pequeños.
Sentía nostalgia y una emoción que no podía expresar. Mamá hubiera amado tanto a Sakura.
Óbito me frunció en ceño y largo una media sonrisa, podía captar algo de mis emociones. Aunque las mantuve a raya.
— Te va a encantar Favila. Yo estoy tan ansioso por regresar.
Sasu estaba sentado con Saku en sus brazos, mientras le contaba como era nuestra casa, y como era todo en nuestro planeta.
— Estoy segura que la reunión no tarda en finalizar. — dijo Mebuki.
La hembra conocía bien los asuntos de los líderes. Aunque su maldito hermano, se habia puesto firme para que ella no esté en la reunión.
Por lo tanto, estábamos en la sala de Ignis, esperando que Minato regresara.Cómo si lo hubiera invocado, la puerta se deslizó y el emperador entró con un semblante que daba miedo.
— Las cosas se complicaron y mucho.— Espetó antes de dejar la chaqueta formal que usaba durante las reuniones y sentarse con los codos sobre las rodillas, sujetando la cabeza con ambas manos.
—¿Tan mal?— Pregunté nervioso. Mí cuerpo empezando a levantar temperatura, frente a cualquier amenaza. Solo quería tomar a mi mujer, mis hermanos, sus amigas y su madre, llevarlas a Favila y ponerlas a salvó de todas está maquinaciones y confabulaciones políticas.
— Su hermano está detenido. Las pruebas que obtuvieron los Ocen, junto a la confirmación de código genético que obtuvieron por parte de algunos de los rescatados, de la base lunar que allanaron, fue decisivo en cuanto a su acusación y posterior condena.— Explico Minato, directamente a Mebuki. La mujer solo suspiro cansada.
— ¿Eso significa que no podrás ir conmigo?— Saku sonaba devastada.
—Nena...— Obito se acercó y Sasu la abrazo, todos la rodeamos.
—Me temo que debo ocuparme de nuestra gente.— Su madre también se sentía
Saku se puso de pie y camino hasta su madre, habían pasado tan poco juntas. Merecían tener la oportunidad de conocerse.
Se fundieron en un abrazo que nos partió el corazón.Una sola mirada a mis hermanos y todos sabíamos que iba a suceder.
Había mucho que organizar, y la prioridad ahora era rescatar a los prisioneros del Planeta Rojo.
Minato se aclaró la garganta.
—Hay más. — soltó.— Una nave de la Confederación se dirige al Planeta Rojo. Tiempo estimado de llegada en los próximos dos ciclos. No responde a ningún intento de comunicación.
ESTÁS LEYENDO
"Planeta Rojo"- Saku-Haren 🔞
FanficEl planeta rojo, la cárcel por elección para los bandidos de la galaxia, no será mí destino final. Nadie sale y nadie sobrevive por mucho tiempo... En teoría. Arrojada, por error, en el sector de los hombres, creo que mis horas están contadas. Pu...