Capítulo 24

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¡Hola gente bella! Acá estoy nuevamente despues de tanto tiempo. Les dejo 2 capítulos más de esta novela que amo tanto.

Jackson

Me encuentro en el escritorio, frente a mi ordenador, ultimando detalles de los proyectos que me dieron para revisar, mi cabeza está puesta solo en el trabajo, no es muy difícil, al menos no para mí, es mi prioridad, el tema es que al convertir a Almendra en mi esposa y venir juntos a Francia, mi nueva secretaria, se ha tornado un fiasco, bastante incompetente y por demás desorganizada. Extraño a Almendra secretaria.

Apoyo la espalda en el respaldo, un bostezo viene a mí y con mi mano derecha agarro el puente de mi nariz, aprieto mis ojos, creo que tendré que ir al médico para ver qué puedo hacer con este maldito dolor de cabeza que me agarra seguido.

Miro por la ventana de la habitación y siento un gran vacío en el estómago, recuerdo que no cené y que dejé a Almendra sola, tengo sentimientos encontrados con este asunto, por un lado quisiera tratarla mejor y por otro necesito poner distancia.

Intento mirar por la ventana de la habitación pero, el ramo de rosas que dejó Stephen se encuentra en la punta del escritorio y llama mi atención. Definitivamente eso aquí va a molestarme de más. Podría llevárselo a Almendra o bien dejarlo en un florero en la cocina, creo que voy a hacer eso. Me acerco, tomo el ramo y salgo de la habitación.
Las luces del pasillo y de su habitación están apagadas, sin embargo, se ve que las del living siguen prendidas, escucho un cuchicheo y cómo de repente Almendra comienza a reir a carcajadas, escucho otra risa y eso me confunde aún más. ¿Con quién está a esta hora?

Termino de bajar las escaleras y me acerco al living, al acercarme veo la escena por completo. En el sillón con una copa en mano está mi reciente esposa y a su lado esta Stephen también con una copa en su mano y con la otra está por acariciar a Almendra. ¡¿Qué hace?! Antes de interrumpir los miro porque dejaron de reir, él le dijo algo cerca del oido y ella le dedica una sonrisa tierna.

Jax- Buenas noches. ¿Interrumpo algo? -Ella saltó de golpe en su lugar él ni se inmutó, sólo soltó una risita que me molestó bastante, porque conozco el por qué de la misma. -Te traje esto Almendra. Me olvidé de dártelo temprano.

Almendra- ¡Oh! Muchas gracias. Voy a la cocina a ponerlas en agua, ya vengo. -Cuando se va mi secretaria clavo la mirada en mi amigo, el cual, se ríe y no entiendo el por qué.

Jax- ¿De qué diablos te ríes?

Stephen- De tu cara, de tu interrupción y de tus celos.

Jax- Lo único que haces es hablar pavadas. No tengo celos por nadie. Menos por Almendra.

Stephen- Como tú digas.

Jax- ¿Puedo saber qué hacés acá?

Stephen- Te dije que si no la ibas a cortejar en su noche de bodas, lo haría yo y acá estoy. Al fin y al cabo, son un matrimonio de mentira, no creo que estés en contra de que coquetee un poco con ella.

Jax- Tenemos un trato, no habrá otra mujer ni otro hombre por dos años y no serás la excepción Stephen.

Stephen- ¿Entonces tendré que hacer trabajo de hormiga y esperar a que pasen esos dos años?

Jax- Deberas esperar y no fastidiar mis planes.- Alza la manos en señal de inocencia.

Stephen- No puedo prometerte nada. Realmente me parece una mujer muy interesante. Tranquilamente podríamos tener un cita.

Jax- Dentro de dos años.

Stephen- Te apostaría lo que sea que vamos a tener una cita antes que ustedes terminen su contrato.

Contrato, matrimonio y algo más.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora