«El hermoso príncipe, se ha convertido en sapo o quizás, jamás fue príncipe»
Hanna Scott, a terminado con su matrimonio. Dejando todo atrás, decide volver a su pueblo natal, donde su amiga Alison Evans, la espera ansiosa.
Este retorno, no sólo...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—La primera regla al conducir, es abrocharse el cinturón Hanna —Matt se acercaba a mi y Ali, se mofaba de la situación.
Sentía el aroma de Matt, y solo quería enrollarme en su cuello, pero hoy no. Era mi primera clase de conducir, así lo decidió Ali.
El Sr. Evans, había pedido esa última semana de vacaciones, «que su hija aprendiera a usar la camioneta», según su padre ya tenia edad suficiente. Matt sería su de maestro. Ali a último momento decidió:
—Yo voy atrás... ¿Hanna? —Jalo de mi brazo y me llevo hacia el asiento del conductor —¡Hoy aprenderás tú! —Exigió con diversión —¿Y tú, que me miras? —Reclamo a su mellizo, cuando este la miraba con asombro —Enséñale ¡Vamos! —Insistió y se acomodo en el asiento trasero de la camioneta, desde ahí le dio un golpecito Matt.
Los primeros pasos eran simples y alguna que otra vez frenaba sin querer. Pero luego de un rato sentí la tensión del castaño y por momentos, olvidaba que Ali, estaba sentada a nuestras espaldas.
—¡Eso hago, eso hago! ¡No me grites! —Reclamaba a mi novio cascarrabias, cuando sus nervios junto a sus manos, indicaban el camino y no dejaban concentrarme.
—¡No sueltes el volante Hanna! ¡Por Dios! ¿¡Estas loca!? —Matt regañaba a gritos y yo, solo quería bajarme de su maldita camioneta.
—¡Ya no puedo, no puedo! —Respondía agobiada frenando la camioneta. Quedo un silencio y solo se escuchaban las respiraciones aceleradas. Luego de un momento y calmarnos un poco, Matt acerco su mano a la mía.
—Tranquila... solo toma aire, podemos continuar mañana... si así lo quieres. —Soltó suave sus palabras y con un poco de compasión acariciaba mi mano, sin darnos cuenta que Ali estaba detrás de nosotros. Hasta que unos aplausos lentos, nos sacaron del momento.
—¡Bravo... Bravo! —Se mofaba Ali —Ahora estoy muy que segura que tú —Se dirigió a su hermano, acercándose a él quedando entre nosotros. —No quiero que me enseñes... Serás mi chofer, por todo el año «Baby» reía victoriosa.
Eso fue lo último que hicimos antes de regresar a la escuela.
╚══ ❀•°❀°•❀ ══╝
Volver a clases después de todo lo que viví ese verano, fue algo extraño. No quería entrar al aula, pero mi motivación era Matt Evans. Y aunque no quería que aquel verano terminara, de alguna u otra forma tenia que conectar con tierra. Me reencontré con amigos de la escuela como Sussan.
—¿Como dijiste que era su nombre? —Ella preguntaba por mi oculto novio.
Cuando éramos niñas, solía contarle uno que otro secreto, pero esta vez decidí que de mi boca, no saldría nada del misterioso romance que teníamos con Matt, pese que ella tenía claro que él, era muy espacial para mí.