Moon Knight V

Tu eres mi lugar seguro (MARC)*

Prólogo: Marc finalmente se siente listo para tener su primera vez contigo.

En libros anteriores ya teníamos las primeras veces de Steven y Jake, por lo que ahora era el turno de Marc, así que espero les guste y lo disfruten ✨️

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Advertencia: Toma lugar cuando Marc aún está en el ejército. Esta es la primera vez de Marc, sexo vaginal con protección, suave, un poco de aftercare (cuidados y mimos después de tener relaciones sexuales).

Cuando en el ejército les daban los fines de semana libre de vez en cuando para que pudieran salir y relajarse, Marc usualmente se iba a tu hogar para pasar tiempo contigo. Ambos se habían conocido en la misma base militar que él estaba ya que tu trabajas en administración, y se veían de vez en cuando.

Su relación aún era algo reciente, por lo que habían cosas que nunca habían hecho como tener relaciones, sobre todo porque también Marc te había confesado que nunca había estado con nadie ya que nunca se había sentido preparado, ni mucho menos había tenido el tiempo para ello o las ganas realmente.

Eso, hasta que te conoció a ti.

Tu siempre habías respetado sus límites por lo que no le presiobas a nada, sin embargo aquel día que te había ido a ver habías notado que estaba algo ansioso, pero tampoco querías agobiarlo con preguntarle sobre ello. Marc a veces era algo difícil de tratar, por lo mismo era mejor que él se acercara y te hablara de lo que le sucedía.

Ambos estaban en tu cama, ya la película de fondo había sido olvidada mientras se besaban, él encima tuyo mientras tus manos se encontraban enredadas en su cabello.

Marc comenzó a dejar besos por tu cuello llevando su mano al borde de tu playera, y una pequeña sonrisa se formó en tu rostro tomándole de las mejillas para alejarlo y poder verlo a la cara.

–¿Qué tienes en mente, Marc Spector?–Le preguntaste sin dejar de sonreír.

Marc tragó saliva bajando la vista avergonzado y con una pequeña risita, antes de volver a verte.

–Estoy listo... enserio quiero estar contigo.–Te dijo con una sonrisa acariciando tu mejilla.

–¿Seguro? Porque no quiero que sientas que te estoy presionando.–Le dijiste acariciando sus mejillas con tus manos.

–Si, estoy seguro.–Dijo sonriendo aún más antes de volver a acercarse para besarte con ternura.

Llevaste tus manos al borde de su playera para quitársela dejándola a un lado, y él hizo lo mismo con la tuya antes de volver a besarte.

Pasaste tus manos por su espalda mientras él sacaba un condón del bolsillo trasero de su pantalón, y luego se alejó para quitárselo, al igual que tú removías los tuyos.

Ya cuando finalmente quedaron desnudos ante la vista del otro sin ropa interior, Marc inhaló profundamente viéndote antes de abrir el condón y ponérselo en su ya evidente erección.

Volvió a posicionarse encima tuyo mientras abrías tus piernas para darle más espacio, y levantó la vista hacia ti antes de besarte nuevamente.

Llevaste tu mano entre sus cuerpos para pasarla por su miembro haciéndole gemir en tu boca, y luego guiaste su punta a tu entrada antes de que empezara a empujar lentamente.

Soltó un gemido tembloroso tomando ambas de tus piernas en sus manos, y escondió su rostro en tu cuello a la vez que arqueabas la espalda soltando un gemido sintiéndole entrar cada vez más.

Finalmente llegó al fondo donde se quedó quieto unos momentos respirando agitado, mientras acariciabas su espalda con ternura.

–Puedes moverte si quieres, Marc.–Le dijiste tomando su rostro con ambas manos dejando su frente juntas con la tuya.

Marc inhaló profundamente y salió de dentro tuyo para luego volver a entrar, así empezando a moverse dentro y fuera hasta tomar un ritmo más seguro.

–Mierda...–Susurró apretando sus ojos antes de abrirlos y ver donde desaparecía dentro de ti sin despegar su frente de la tuya.

A pesar de no tener muy claro qué debía hacer, Marc poco a poco iba ganando más confianza empezando a moverse más rápido sintiéndose seguro al estar contigo, y apoyó una mano junto a tu cabeza y la otra aún sosteniendo tu pierna antes de besarte.

Pasaste tu lengua por su boca haciéndole gemir sujetando ahora ambas piernas con sus dos manos alrededor de su cintura.

Marc empezó a sentir su orgasmo aproximarse más y más, y escondió su rostro en tu cuello soltando pequeños gemidos temblorosos.

–Hazlo Marc, tranquilo... aquí estoy.–Le susurraste al oído acariciando su cabeza y con la respiración agitada.

Marc aceleró sus movimientos volviéndose más desordenados y desesperados haciéndote gemir, hasta que finalmente se corrió en el condón gimiendo tu nombre en tu oído a la vez que sus piernas temblaban.

Una vez estuvo vacío, colapsó encima tuyo abrazándote y quedando recostado de lado sin soltarte escondiendo su rostro en tu cuello.

Llevaste tus manos para acariciar su espalda y jugar con su cabello mientras aún recuperaban el aire perdido.

Marc se alejó un poco para verte con una sonrisa y luego te besó con ternura acariciando tu cadera con su mano.

–Nunca me había sentido tan bien como ahora... de hecho... nunca me siento tan bien como cuando estoy contigo.–Te dijo con una gran sonrisa apartando un mechón de tu cabello de tu rostro.–Tu eres mi lugar seguro...

–Y tu el mío, Marc. Sabes que siempre voy a estar aquí para ti.–Le dijiste con una sonrisa dejando un beso en su nariz.

Ambos se quedaron unos momentos en silencio abrazados mientras se acariciaban, hasta que Marc frunció el ceño y se alejó para verte a la cara.

–Oye linda pero tu no te—

–Está bien... esto se trataba de ti, quería que tú te sintieras bien.–Le dijiste sin dejar de sonreír acariciando sus mejillas.

–Oh no, eso sí que no. Aquí tenemos que disfrutar los dos.–Te dijo saliendo de dentro tuyo y sentándose en la cama para sacar el condón y dejándolo a un lado.

–¿Y ahora qué haces?–Le preguntaste soltando una risita.

–No pienso dejarte así.–Dijo tomando su pantalón del suelo para sacar otro condón y ponérselo.–Quiero que los dos disfrutemos, ¿está bien?

–Bien...–Reíste mientras él se acercaba para besarte con ternura y acariciando tus piernas.