Moon Knight V

Canas y arrugas

Prólogo: Durante una misión la persona a la que perseguían les hace algo a los chicos que los vuelve 15 años más viejos con canas y arrugas más marcadas, pero tu estás ahí para hacer a un lado sus inseguridades y decirles que siguen siendo igual de guapos.

miquilla09

Ya estabas completamente dormida para cuando los chicos llegaron a casa de su misión, sin embargo frunciste el ceño comenzando a despertar poco a poco al escuchar la voz de uno de ellos murmurar por lo bajo.

–¿Qué se supone que le vamos a decir? Míranos Steven, tenemos como quince años más encima.–Escuchaste la voz de Marc murmurar molesto desde la cocina.–¿Tú de verdad piensa que no lo va a notar? ¡Claro que se va a dar cuenta, Steven! Y tu cierra la boca Jake que no ayudas... sé que no fue tu culpa, OBVIAMENTE no es culpa de ninguno pero tú y tus tontos comentarios no me dejan pensar.

Te sentaste en la cama con el ceño fruncido ahora completamente despierta, y te pusiste una sudadera de Marc para ir a la cocina.

–¿Todo bien?–Le preguntaste encendiendo la luz.

Marc se quedó inmóvil en su lugar sin voltearse hacia ti donde estaba de espaldas, y tragó saliva nervioso.

–Ya nos llevó la chingada...

–Lo mejor habría sido no volver hasta encontrar una solución para esto...

–¿Marc?–Preguntaste acercándote a él dejando tus manos en sus hombros.

Marc inhaló profundamente y se volteó lentamente hacia ti por fin dejándote ver su rostro.

Al verlo, te quedaste ligeramente boquiabierta observando como su cabello tenía muchas más canas de como cuando se fue, y su rostro tenía más arrugas algo marcadas.

–¿Qué les pasó?–Le preguntaste tomando su cara con ambas manos pasando tus pulgares por sus mejillas donde habían unas cuantas arrugas.

–La persona que estábamos persiguiendo nos tomó por sorpresa y... bueno... ni siquiera sé muy bien como explicarlo, pero algo hizo que ahora somos quince años más viejos... o-o al menos nos vemos así.–Murmuró sin poder verte a los ojos y jugando nervioso con sus manos.

–¿Pero ustedes están bien? ¿Están lastimados?–Le preguntaste dejando una mano en su mejilla y la otra en su brazo.

–Estamos bien, no te preocupes.–Te dijo con una pequeña sonrisa provocando que se le marcaran aún más las arrugas.

Una sonrisa se formó en tu rostro y te acercaste para abrazarlo acariciando su espalda, mientras él soltaba un suspiro y se abrazaba a ti con fuerza.

–Pero eso no es lo único, ¿o si? Algo les pasa.–Le dijiste con suavidad llevando una mano para jugar con su cabello que ahora tenía más canas en él.

–¿Aún te gustamos?–Te preguntó en voz baja manteniendo su rostro escondido en tu cuello.

–¿A qué te refieres?–Le preguntaste nuevamente tratando de alejarte para verle a la cara, sin embargo Steven te abrazó aún más fuerte para mantener su rostro escondido y no le vieras.

–E-es que... querida... tenemos arrugas, canas... nos vemos mucho más viejos de lo que somos, y... y-y al principio trataba de convencernos de que nos veíamos bien, pero ahora... e-en realidad no sé si sea tan así...–Murmuró avergonzado sin tener el valor de verte a la cara.

–Steven... mon amour mírame.–Le ordenaste con suavidad tomando su rostro con ambas manos, mientras él te observaba nervioso.–Ustedes se siguen viendo igual de guapos que antes, con canas y arrugas o no, ¿eso qué importa? Se ven muy hermosos.

–¿Estás segura?–Te preguntó viéndote algo nervioso apretando sus manos en puños a cada lado suyo, mordiendo su labio inferior.

–Muy segura, ustedes siguen siendo los mismos hombres guapos y sexis de los que me enamoré.–Le dijiste con una sonrisita pasando tus brazos alrededor de su cuello.

–¿A-ah si?–Dijo con las mejillas sonrojadas y dejando sus manos en tus caderas.

–Mhm...–Respondiste antes de acercarte para besarlo con ternura.

–Yo les dije que nos veíamos bien.–Dijo Jake haciendo rozar sus labios con los tuyos, dándoles un juguetón mordisco.–Aunque aún así no me molestaría volver a la flor de mi juventud, el pajarraco dijo que iba a cobrar un favor que le debían para deshacer esto.

–Okey... aunque las canas si les quedan muy bien.–Le dijiste con una sonrisita acariciando sus mejillas.

–¿Uste' cree...? A mi no me gustan pero si a uste' si, entonces podríamos llegar a un acuerdo...–Dijo bajando sus manos hacia tu trasero, alzando ambas cejas de forma sugestiva.

Soltaste una pequeña carcajada y le besaste nuevamente, mientras que Marc volvió a tomar el control.

–Te amo...–Te susurró juntando su frente con la tuya.

–Yo también los amo, con o sin canas, con o sin arrugas, los sigo amando igual que siempre, y eso nunca va a cambiar.–Le dijiste con una sonrisa volviendo a besarlo con ternura.