Moon Knight V

Un nuevo sentimiento (STEVEN)

Prólogo: Después de escapar de Hydra y de llegar a vivir a Londres, conoces a Steven en el museo donde comienzan a hacerse bastante cercanos.

NataliaRoman023

Habías sido experimento de Hydra por bastante tiempo, hasta que finalmente lograste escapar.

Lo único que querías era poder tener una vida tranquila así que te fuiste a Londres ya que era un lugar que te hacía mucha ilusión conocer, y terminaste quedándote a vivir allí y empezaste a trabajar en el museo en la tienda de regalos ya que necesitaban a alguien después de que ascendieron al chico anterior a guía turístico.

Las cosas iban bien, hasta que Khonshu les dio la tarea a los chicos de perseguirte y hacerte pagar por los "viajeros de la noche" que estando bajo el control de Hydra habías lastimado y/o asesinado.

Honestamente fue una tarea difícil poder realmente acercarse a ti y pelear contigo ya que habías sido entrenada por mucho tiempo y estabas preparada para cualquier cosa, mientras tanto en el museo conociste a Steven y empezaste a hacerte bastante cercana a él.

Ya después de un tiempo él te confesó sobre su TID y que ellos eran Moon Knight, por lo que te pidió disculpas y te dijo que llevaba tiempo convencer a los chicos y a Khonshu de dejarte en paz, lo cual finalmente consiguió.

Mientras más tiempo pasaba y se hacían amigos, Steven empezó a tener sentimientos por ti, pero Marc y Jake preferían mantener la distancia y no involucrarse por miedo a que sucediera lo mismo.

Por sus horarios en el museo tu llegabas antes que Steven, y cuando llegó te vio en la tienda, sin embargo frunció el ceño al ver las ojeras bajo tus ojos y que te notabas más cansada de lo habitual.

–Buen día querida.–Te saludó con una sonrisa provocando que levantaras la vista y le ofrecieras una también.

–Hola Steven.–Le saludaste mientras ordenabas unas golosinas en el mostrador.

–¿Te encuentras bien? Te ves algo... cansada, ¿tuviste mala noche?–Te preguntó preocupado sujetando el pequeño bolso en su hombro.

–Tuve un par de pesadillas y después no pude dormir, pero nada más, no te preocupes.–Le dijiste con una sonrisa antes de que Donna llegara.

–Stevie, ya deja de distraer a mi chica, tiene mucho trabajo que hacer y tu no se lo permites.–Le reclamó ella dejando una caja sobre el mesón.–Pareciera que pasas más tiempo en la tienda ahora que no trabajas aquí que cuando lo hacías.

–Buen día para ti también, Donna.–Le dijo él con una pequeña sonrisa falsa.

–Eran buenos...–Murmuró ella viéndole de pies a cabeza antes de dirigirse a ti.–Quiero que tengas esto listo antes de que abra el museo.

–No hay problema.–Respondiste soltando un suspiro y acercando la caja para empezar a ordenar.

Donna se fue y Steven se le quedó viendo un momento, antes de sacar de su bolso su termo y extenderlo hacia ti.

–¿Qué es eso?

–Es té... no traigo café porque la verdad no me gusta mucho, pero si traigo té.–Te dijo con una sonrisa.–He leído que el té también te ayuda a despertar, y de los dos creo que tu lo necesitas más que yo.

–No es necesario Steven, enserio estoy bien.–Le dijiste con una sonrisa bajando la vista para que no notara tus mejillas sonrojadas.

No sabías por qué, pero Steven te hacía sentir cosas que nunca antes habías experimentado, y honestamente no sabías cómo reaccionar a ello o qué hacer ya que nunca habías vivido nada así con nadie, y tampoco sabías si a él le sucedía lo mismo.

–Por favor querida, insisto. Necesitas despertar, además si quieres soportar a Donna todo el día lo vas a necesitar.–Te dijo con una sonrisa tomando tú mano para que recibieras el termo, y tú reíste ligeramente haciéndole sonreír de forma boba.

–Gracias...–Le dijiste con una sonrisa.

Ambos se quedaron viendo unos segundos, hasta que nuevamente Donna llegó.

–¿Acaso te vas a quedar conversando todo el día o enserio vas a hacer algo por tu vida?–Te dijo molesta provocando que apartaras la vista y volvieras a trabajar.–Te pago por ordenar, vender, hacerte cargo de la tienda, no por pasartela conversando y haciéndole ojitos a este que no te deja en paz.

–Lo sé Donna.–Rodaste los ojos mientras ordenabas, y Steven la veía mal.

–Hoy te quedas a inventario.–Te dijo antes de irse.

–Lamento meterte en problemas...–Te dijo Steven apenado.

–No pasa nada, a Donna le gusta molestar a la gente, y cuando ella no tiene un buen día no quiere que nadie más lo tenga, tu lo debes saber bien.–Le dijiste con una pequeña risita.

–Puedo quedarme contigo, s-si no te molesta.–Te dijo provocando que levantaras la vista hacia él.–Digo... puedo hacerte compañía y ayudarte también, y después podemos cenar juntos.

–Oh no, no es necesario Steven, enserio no te preocupes, vas a estar cansado después de tantos tours y—

–Por favor querida, enserio me gustaría quedarme contigo, así pasamos un ratito más juntos.–Te dijo con una sonrisa boba y brillo en sus ojos, dejando sus manos cerca de su corazón.

–Okey... bien... si no tienes problema con eso.–Le dijiste con una sonrisa.

–¡Genial! Entonces te veo más tarde.–Dijo emocionado inclinándose para dejar un beso en tu mejilla, y luego se fue hacia la zona de tours.

Mientras tanto, una sonrisa se formó en tu rostro y tus mejillas se sonrojaron ligeramente llevando tu mano a donde dejó el beso, y a la vez que Steven se iba también se sonrojó y no pudo evitar sonreír embobado llevando su mano a sus labios.