Moon Knight V

Profesor Spector (MARC)*

Prólogo: Marc descubre que al parecer también le gusta ese juego de ser tu profesor.

Si tienen ideas o pedidos, los pueden dejar por aquí o por privado si se les hace más cómodo ✨️

snxwgirl
Advertencia: Roleplay, Marc dominante, lectora sumisa, sexo anal sin protección (por favor usen globito que es importante), fingering (masturbación femenina), dirty talking (hablar cosas obscenas durante relaciones sexuales o no hacia la otra persona para exitarla, ya sea sobrenombres o descripción de cosas o acciones), un poco de humillación tal vez (?), marcas, jalar el cabello, nalgada, dacrifilia ("es una parafilia sexual que consiste en la excitación al ver las lágrimas de otra persona").

Todo había comenzado como un inocente comentario.

Marc estaba sentado a tu lado en el escritorio de Steven esperando a que terminaras de hacer tu trabajo cuando vio los anteojos de Steven y se los probó.

Era un comentario inocente, enserio que lo era, pero al parecer Marc estaba más necesitado que otros días y eso le emocionó más de lo que debería haberlo hecho.

Lo único que dijiste fue que se vería muy guapo como profesor con esos anteojos, y todo estaba perdido.

–Tranquila bonita, tu profesor está aquí.–Dijo Marc con una pequeña risita jalando de tu cabello mientras te embestía con fuerza por atrás.

Te tenía inclinada hacia adelante sobre el escritorio de Steven, todas sus cosas en el suelo con tus pantalones en el piso al igual que los suyos, tu cabello en una coleta afirmado solo por su mano en la ya que se le notaban las venas al igual que en su brazo, mientras seguía con los anteojos puestos.

Honestamente se le hacía extraño ser llamado profesor ya que usualmente era algo que hacías con Steven, pero la verdad también le estaba gustando.

–M-marc...–Gemiste arqueando la espalda.

–¿Qué dijimos, preciosa?–Preguntó con la voz ronca deteniendo sus movimientos por completo e inclinándose hacia adelante para susurrarte al oído sin dejar ir tu cabello.–¿Quién soy yo?

–P-profesor S-spector... por favor...–Le suplicaste con la respiración agitada y las mejillas sonrojadas.

–¿Por favor qué? ¿Mm?–Preguntó con su otra mano dándote una nalgada que te hizo dar un pequeño salto antes de abrir tus ojos y verle a tu lado.

Tenía el cabello desordenado y sus rizos cayendo por su frente, los anteojos puestos y con las mejillas algo sonrojadas con pequeñas gotas de sudor recorrían su rostro.

–¿Qué es lo que quieres?–Te preguntó tomando tú mandíbula con la mano que anteriormente te dio la nalgada y la otra sujetando tu cabello, para voltearte ligeramente hacia él y hablar con sus labios rozando los tuyos.–Dime qué es lo que quieres.

–Q-que siga, por favor... profesor S-spector.–Le pediste con lágrimas de placer corriendo por tus mejillas.

Marc sonrió y besó tu mejilla justo donde caía una lágrima antes de besarte con fuerza en los labios.

–La verdad es que te has comportado bastante, estás de suerte hoy.–Te dijo con una sonrisa antes de dejar ie tu mandíbula.

Nuevamente comenzó a embestirte con fuerza dejando ir tu cabello provocando que colapsaras en el escritorio tratando de afirmarte con tus débiles brazos, y llevó su mano izquierda por delante de tu cuerpo para masajear tu clítoris.

Soltaste un fuerte gemido mordiendo tu brazo y Marc empezó a mover sus dedos a la misma velocidad que sus embestidas provocando que tus piernas empezaran a temblar.

–Puedo sentir que estás cerca... vamos, hazlo. Yo sé que quieres.–Dijo con los dientes apretados y la respiración agitada.

Gemiste su nombre en alto y finalmente te corriste mientras ambas de sus manos apretaban con fuerza tus caderas dejando marcas en ellas sin dejar de embestirte.

Marc siguió moviéndose durante tu orgasmo prolongándolo un poco más a la vez que sentía el suyo aproximarse.

Soltó un gemido dejando caer la cabeza hacia atrás antes de correrse dentro tuyo viendo hacia donde su miembro desaparecía dentro tuyo dejándote quieta tratando de llegar lo más profundo posible.

Marc apoyó ambas manos a cada lado tuyo en el escritorio agotado y su frente la dejó en tu espalda repartiendo besos por ella abrazándote ya una vez estaba vacío.

–Quién diría que... que ahora a ti también te gustan esos lentes.–Le dijiste agitada y soltando una pequeña risita.

–No le digas a Steven.–Te dijo riendo besando tus hombros hasta llegar a tu mejilla.

Reíste rodando los ojos y volteaste un poco la cabeza para besar sus labios con ternura.