♡*:.｡. cσqυєτσs sєทτiмiєทτσs .｡.:*♡ YoonMin (ℓiвrσ τrєs)

💓 cαρiτυℓσ τrєiทτα y sєis 💓

JiMin sollozó entre lágrimas mientras YoonGi le hacía un masaje a sus piernas con mentol para el dolor.

Claro.

Todo bonito hace horas, pero cuando despertó, sus piernas le dolían terriblemente, sus caderas igual y ni hablar de su espalda baja.

Esa eran las consecuencias de tener sexo toda la bendita noche, eso y quedar afónico luego de tantos gritos y gemidos.

Él solo estaba llorando de dolor y eso que ya se había tomado algunas pastillas, pero igual el dolor no se iba. Lo peor de todo es que mientras él estaba que se quería morir, YoonGi estaba de lo más tranquilo porque hasta el dolor en el hombro se había ido.

Ese dulce coqueto.

— Me-Me duele el trasero... — Susurró entre hipeos — Me siento más abierto que corazón de condominio.

Con la mirada baja, YoonGi sonrió mientras intentaba no reírse ante sus comentarios, mejor se dedicó a seguir haciéndole masajes a sus piernas.

— ¿Por-Por qué no paraste cuando te lo pedí?

YoonGi hizo una mueca.

¿Le había pedido que parara?

Porque él recuerda que más bien le pedía que siguiera.

— No sé qué es más grande, si el dolor en el trasero o el ego de mi papá — Murmuró — Y mira que su ego es muy grande.

" No solo su ego "

YoonGi sonrió mientras negaba ante las miles de veces que había visto desnudo a YajaTzael.

— El sexo estuvo muy bueno, pero me siento indignado porque el ingrato del cachorro se escapó — Susurró — Ya hasta había pensado en su nombre.

Sollozando solo porque ya no podía parar de llorar, vio cómo un sonriente TaeHyung entraba a la habitación junto con JungKook.

— ¡Aquí están las pastillas que me pediste, Yoonie!

Eufórico corrió hacia la cama mientras JiMin volteaba a ver de mala manera a JungKook tras escuchar la carcajada que éste soltó al verlo.

— No jodas, Hyung. ¿Te cogieron tres negros o qué?

Como YoonGi no podía, realmente rió ante su comentario, ganándose así una patada en la cara de parte de JiMin que de verdad lo hizo caer de la cama.

— Hey, dejen a JiMinie en paz.

Sonriendo de forma adorablemente geométrica, TaeHyung abrazó a JiMin tipo osito de felpa.

— Mírate, JiMin-Hyung, parece que un millón de sanguijuelas se te pegaron en el cuerpo — Se burló JungKook — Qué intenso todo, ¿eh?

JiMin jura que deseaba ponerse de pie para golpearlo, pero no lo hacía porque sabía que perdería el equilibrio ante sus piernas.

— Te esperan horas negras, Jeon JungKook — Gruñó — Juro que me las voy a cobrar.

— Tus amenazas solo provocan que me dé hambre, ¿sabes, Hyung? — Respondió — Debes estar más abierto que corazón de condominio.

Mientras se levantaba del piso, YoonGi rió antes de darle el puño porque de verdad que le había aprendido lo burlón y maldito.

— Ríe ahora, pero espero que algún día alguien te haga sentir lo que yo y ese día seré yo quien me burle de ti — Espetó JiMin — Algún día.

— Pues, tu papá me llega a tentar mucho, pero aún no me decido.

TaeHyung hizo una línea con los labios para no reír porque sabía de que JiMin era bastante celoso con YajaTzael y que JungKook dijera eso se merecía mínimo, un puñetazo, pero como estaba a la orilla de la cama, solo cogió el vaso con agua y se lo tiró en la cara.