♡*:.｡. cσqυєτσs sєทτiмiєทτσs .｡.:*♡ YoonMin (ℓiвrσ τrєs)

💓 cαρiτυℓσ cυαrєทτα y ทυєvє 💓

ZuHi sonrió cuando entró a su casa luego de tanto tiempo de haber estado en una maldita cama a causa de YajaTzael.

Ese maldito se las iba a pagar todas y Zael sería el pagano.

— TaeHyung, mi amor, ¿estás aquí?

Dando un leve masaje en su cuello, dejó el bolso sobre la mesa para encaminarse a la sala, justo en donde estaba TaeHyung sentado en uno de los sillones mientras veía la revista de moda en donde su rostro era la portada.

— Cariño, debo contarte tantas cosas.

Sonriendo de emoción, se acercó a su hijo para posicionarse frente a él y así dejar un beso sobre su frente mientras le acariciaba la mejilla.

— No sé qué te dijo tu papá, pero estuve en el hospital porque el animal de YajaTzael casi me mata — Espetó — Debemos ir a poner la denuncia, corazón.

TaeHyung despegó sus bonitos ojos de la revista y levantó la cabeza para verla y sonreírle suave como una dulce bienvenida.

— No te preocupes, mamá, él ya tuvo su merecido por haberte tocado — Respondió — Por el momento, siéntate y hazme un favor, ¿sí?

— Claro que sí, bebé.

Paciente esperó a que ZuHi se sentara frente a él y luego de verla cómoda, tomó el sobre que estaba sobre la mesita y lo abrió para sacar unos documentos.

— Necesito que me firmes esto, por favor.

Tras tender los papeles de carácter legal, ZuHi los aceptó y antes que nada, empezó a leer detenidamente de lo que se trataba, así que mientras ella los analizaba, él estaba cruzado de piernas de una forma muy tranquila.

Todo estaba absolutamente planeado, tenía más de un plan si es que el primero no funcionaba y más que nada, testigos y pruebas en audio y vídeo acerca de lo que estaba sucediendo y sucedería en esa sala en la que los dos eran los protagonistas.

— ¿Qué clase de broma es esta, TaeHyung?

Tras haber leído muy bien cada documento y darse cuenta de lo que eran, ZuHi levantó la cabeza con aparente cólera.

— No es ninguna broma — Respondió — ¿A caso escuchas las risas o ves a los payasos?

— TaeHyung, estoy hablando en serio.

De malhumor, ZuHi rompió cada documento y los trocitos los lanzó al piso para luego ponerse de pie y buscar cómo salir de la sala.

— Esto es asunto de tu papá y mío — Aclaró — Y me parece de muy mal gusto que él te utilice para estas bajezas.

— De verdad que quise hacer esto por las buenas, ZuHi, pero a ti te encanta hacer todo por las malas — TaeHyung rió — No hemos terminado, siéntate.

— No estás entendiéndome...

— Tú no me estás entendiendo — Enfatizó — Esto te conviene más de lo que piensas, ZuHi.

— Soy tu mamá, respétame — ZuHi exigió — No sé qué pasa contigo, pero no estoy de humor para seguir tu juego.

Sintiéndose irritada, miró la sonrisa de TaeHyung y después decidió salir de ahí, pero antes de dar un paso, se reprodujo un vídeo en la TV que la dejó petrificada.

Era el vídeo de la noche en que GiYoon mató a Jaeh, el mismo vídeo que ella tenía guardado bajo llave en sus cajones.

¿Cómo TaeHyung lo consiguió?

— ¿Cómo debería llamarte? ¿Shin ZuHi o Choi ZuHi?

Bien.

No entendía muy bien a lo que TaeHyung estaba jugando, pero aún así se dio la vuelta para encararlo y demostrar que no se sentía intimidada en lo más mínimo.