♡*:.｡. cσqυєτσs sєทτiмiєทτσs .｡.:*♡ YoonMin (ℓiвrσ τrєs)

💓 cαρiτυℓσ vєiทτi∂σs 💓

JiMin sonrió de pura emoción, sus labios creaban unas curvas tan hermosas por la simple y sencilla razón de que le había preparado el desayuno a YoonGi y en ese momento se encontraba yendo directo a la habitación que compartían.

A pesar de que el mayor seguía estando serio con él, ya no lo ignoraba como antes, así que entendía el punto en el que habían llegado.

Ahora, si todo eso era solo una prueba de la vida, entonces iba a procurar pasar con diez.

Joder que sí.

Sonriendo a más no poder abrir la puerta y eufórico buscó a YoonGi.

— Oh, mierda...

Maldición.

Se había tardado más de una hora en preparar el desayuno que ahora todo el esfuerzo se había ido al caño cuando terminó botando la bandeja al quedar malditamente atónito por lo que estaba frente a él.

¿Cuándo fue la última vez que vio a YoonGi desnudo?

Hace siglos, posiblemente, y ahora que estaba frente a él, viendo cómo se secaba el cabello sin una toalla alrededor de su cintura, provocó que retrocediera hasta chocar estrepitosamente con la puerta.

Bajó la cabeza y nervioso notó la erección que se le hizo al ver al mayor desnudo.

Genial.

— Yo-Yo lamento haber entrado sin tocar...

Jodidamente nervioso y malditamente avergonzado se agachó para empezar a recoger todo el desastre que creó, sin saber que YoonGi lo estaba viendo con una sonrisa tan sucia y coqueta.

— Prometo que para la próxima tocaré antes de entrar, Hyung — Murmuró con torpeza — Fue una falta de educación entrar sin antes pedirte permiso. Lo siento.

Joder.

La vergüenza era mucha, su rostro estaba rojo y caliente y los nervios lo estaban controlando. Lo peor era que, mientras recogía todo, en su mente se reproducía una y mil veces a un YoonGi desnudo.

Dios.

Su cuerpo tan blanco, su piel decorada por los vulgares tatuajes, las perforaciones que tenía por todos lados, las venas en los brazos y en las manos, sus piernas largas y delgadas, su abdomen.

Mierda.

" Debes controlarte, Park JiMin "

— No quiero que pienses de que soy un vulgar pervertido y que entré para verte desnudo — Murmuró — Juro que no lo sabía y-y...

Cuando, mientras terminaba de levantar todo y miró unas blancas piernas posarse frente a él, intentó poner toda su fuerza de voluntad para no levantar la cabeza, pero toda esa fuerza de voluntad no sirvió para nada porque ya se encontraba alzando la mirada.

Sus pecaminosos ojos saltarines recorrieron las blancas piernas hasta que su mirada se clavó en un solo punto que lo hizo tragar malditamente pesado.

La entrepierna de YoonGi.

Mierda y mil veces mierda.

Ver nuevamente el miembro perforado, lo estaba haciendo perder la compostura y eso era lo que menos quería.

— ¿Sabes qué? Yo mejor me voy y más tarde regreso por los platos rotos.

Intentando por todos los medios de huir de esa situación, se levantó rápidamente y corrió directo a la puerta. No se detuvo para nada y solo siguió corriendo por los pasillos hasta llegar a las escaleras, las cuales empezó a bajar con tanta rapidez y torpeza que terminó enredando sus pies y al final cayó al piso.