- ¿madre? - cuestiono Kara, pues hacia algún tiempo que no escuchaba su voz, sabía que no sería una plática amena, pero era algo que tenía que hacer, tenía que liberarse de ese nudo en la garganta que no le permitía avanzar, era un ciclo más que tenía que cerrar para ser completamente feliz.
Continuara...
- tu. - respondió Alura al reconocer la voz de su hija del otro lado de la línea. - ¿Qué no fui lo suficientemente clara la última vez que hable con tu padre? - cuestiono la mujer con molestia. - no quiero hablar contigo.
- lo sé, pero yo necesito hablar contigo. - respondió Kara con determinación. - mi padre ya me ha puesto al tanto de su conversación, pero, aun así, necesito que me escuches. - dijo con decisión, quería ser escuchada por su madre y lo conseguiría. - no te quitare mucho tiempo. - aseguro.
- suspiró. - te escuchare, pero te advierto que no tengo mucho tiempo, ni paciencia para tus tonterías. - respondió Alura, pues su esposo y sus hijos estaban por llegar y no quería que ellos supieran que hablaba con Kara, además de que tenía una ligera idea de lo que su hija le diría.
- mamá... soy gay. - soltó sin más, después de todo si su madre ya lo sabía no tenía caso adornarlo con palabras bonitas o andarse con rodeos.
- ¡¿Qué?! - grito más que molesta Alura por las palabras de su hija. - ¿ERA ESO LO QUE TENIAS QUE DECIRME? ¿ERA ESA ESTUPIDEZ? - cuestiono aún más molesta, sabía que eso era lo que Kara iba a decirle desde un principio, pero aun así no dejaba de molestarle el escuchar esa palabra.
- para ti será una estupidez madre, pero para mí es muy importante que lo sepas, es lo que soy. - hablo Kara con seguridad, tenía que hacerle ver a su madre que eso era algo que no podía cambiar ni, aunque lo deseara.
- bien, pues como ya le habia dicho a tu padre, ya lo sabía ¿acaso no pensaste que eras demasiado obvia? - cuestiono Alura, pero antes de recibir respuesta de parte de su hija siguió hablando. - si era todo lo que tenías que decirme entonces adiós. - hablo dispuesta a terminar la llamada.
- no, aún hay algo más. - tal vez no la acompañaría en el día más importante de su vida, pero quería que lo supiera. - me he enamorado y... voy a casarme en aproximadamente dos semanas. - declaro con seguridad.
- ¡¿Cómo?! No... no puedes hacer eso... se irán al infierno... tú y esa muchacha que te ha corrompido. - declaro Alura con asco en la voz al escuchar la declaración de su hija.
- eso ya no es asunto tuyo madre. - dijo con dolor en la voz. - solo quería infórmate, la decisión ya está tomada. - declaro Kara, para hacerle entender a su madre que no tenía poder sobre su vida, ya no.
- ¿entonces no te importa ir al infierno por lo que harás? - cuestiono Alura incrédula por las palabras de su hija.
- si ese es mi destino por ser como soy lo aceptare y lo hare con la frente en alto. Estaba orgullosa de quien era y no iba a cambiar a estas alturas del partido. - así nací y créeme cuando te digo que jamás me arrepentiré de las decisiones que estoy tomando, porque lo que estoy haciendo, lo hago por mí, porque esta es la persona que yo soy, no lo que otros esperan de mí, voy a disfrutar mi vida al máximo con las consecuencias que conlleven mis decisiones. - declaro Kara con firmeza para que su madre entendiera que no era un juego; ya no era una niña, ella tomaba sus propias decisiones y no aceptaría que fuera de otra forma.
- si es tu decisión, entonces no tengo nada más que decirte, pero quiero que sepas que, si cometes esa abominación de casarte con otra mujer, no volverás a saber nada de mi ni de tus hermanos. - amenazo Alura, sabiendo que Kara adoraba a sus hermanos y esa era un arma que usaría para disuadir a su hija de cometer esa aberración.
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Un Amor para Recordar
FanfictionUn corazón roto por la traición busca un lugar para desaparecer, una corazón confundido que no tiene idea de que hacer con sus sentimientos ¿será el amor mas grande que la desconfianza? ¿se puede sanar un corazón roto?