Un Amor para Recordar

Capítulo 22

- UAAAAHHHH. – grito con todo el dolor y la impotencia que sentía, ¿Por qué? Se repetía una y otra vez, ¿Qué había hecho mal? ¿Por qué después de darle la mejor de las noches lo dejaba? ¿Por qué la historia se repetía de nuevo?

Continuara...

Se lo habían hecho de nuevo y esta vez había sido peor, Lena ni siquiera le había dado la cara, cuando menos Lucy había tenido el valor de decírselo de frente, pero para la pelinegra ella significaba tan poco que solo le había escrito unas cuantas líneas para expresar su sentir hacia ella y dejarle claro que una relación así no le interesaba. Se levantó de la cama tomo su bóxer, su sujetador, se los puso lentamente y se sentó en la cama a pensar mientras las lágrimas caían furiosas de sus ojos, vinieron a su mente los recuerdos, las cosas maravillosas que había compartido con Lena, no, no quería recordar, quería olvidar, si, olvidarse de todo, pero ¿Cómo? Así que sin más se levantó y comenzó a golpear la pared con sus manos desnudas, después de todo, si sentía dolor, su cerebro solo se concentraría en eso y no pensaría en Lena.

Por otro lado, en el comedor habían escuchado ese grito, Alex, Sam, Sara, Ava, Nia, Irma y Winn ya estaban despiertos y se estaban poniendo de acuerdo en quien cocinaría el desayuno en esta ocasión, estaban divirtiéndose a costa de Sam que se sonrojaba con facilidad, cuando escucharon el grito, inmediatamente Alex se levantó de su asiento junto con Sam.

- Kara. – susurro la pelirroja y salió corriendo escaleras arriba, era Kara, sabía que era ella ¿Qué había sucedido?

- Alex. – hablo Sam y salió corriendo tras su novia, sabía que cuando se trataba de Kara, Alex era tan protectora como con ella, así que no la podía dejar sola.

Mientras los que estaban en el comedor se habían quedado asustados y sorprendidos, ese grito había sonado como el de un animal herido, como si estuviera experimentando un gran dolor.

- Chicos, ¿creen que deberíamos subir? – cuestiono Winn, Kara era su amiga, aunque tuviera poco tiempo de conocerla le tenía un gran cariño.

- no, la rojita ya ha ido, además, esto parece un problema de la familia Zor-El. – contesto Lance, quien no había dejado de ver a Irma desde que se les unió, quien, al escuchar el grito, no pudo reprimir una sonrisa de triunfo y eso para ella no pintaba nada bien, al parecer esa chica estaba tramando algo y ella como sucesora de la familia Lance quien se encarga de velar por la seguridad de la familia Zor-El, no se lo permitiría.

- pero Sara, parecía como si fuera algo grave. – replicaba Ava, sabía que tal vez Sara tenía razón, pero si había algo en lo que pudiera ayudar le encantaría hacerlo.

- Ava, si la rojita necesita ayuda vendrá a nosotros, desde que Kara está aquí, se ha vuelto más abierta, dejémoslas solas por un momento, quedémonos a la espera. – hasta para ella había sido notorio el cambio que había hecho Alex después de la llegada de Kara, sabía que de presentarse algo, Alex los llamaría.

- Lance, has dicho que este asunto solo le concernía a la familia Zor-El, pero Arias ha subido hecha un bólido tras Zor-El. – hablo Irma, ella tenía la intención de consolar a Kara, pero ahora gracias a Lance su plan se había frustrado.

- Arias esta con la rojita, ella es prácticamente de la familia Zor-El. – hablo Sara sin voltear a ver a Irma, pero al ver que la chica quería replicar volvió a hablar. – como sea, esperemos a ver qué pasa. – no quería hablar con esa chica, al parecer sus sospechas se estaban haciendo ciertas.

- Sara tiene razón, es mejor dejarlos a solas y esperar. – hablo Nia, aunque ella estaba muy preocupada, se suponía que Lena debería de estar con Kara y por ese motivo ese grito no hacía sino ponerla nerviosa.