Un corazón roto por la traición busca un lugar para desaparecer, una corazón confundido que no tiene idea de que hacer con sus sentimientos ¿será el amor mas grande que la desconfianza? ¿se puede sanar un corazón roto?
Tuvieron que separarse por la falta de aire, lastimosamente tenían que respirar, Lena estaba un poco sonrojada y Kara con una sonrisa boba en el rostro, con ese beso ambas habían confirmado sus sentimientos, se amaban, estaban enamoradas, contra todo pronóstico, fueron presas del amor a primera vista; en algún momento sus miradas se volvieron a cruzar y nuevamente sin poder o querer evitarlo cayeron bajo ese hechizo nuevamente, ese que las deja una a merced de la otra, una vez más la distancia entre ellas se hacía más corta y estaban a punto de repetir ese beso que para ambas habia sido mágico, pero algo dentro Lena reacciono y volteo el rostro en le momento justo para evitar el contacto con los labios de Kara.
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- ¿Qué sucede Lena? ¿hice algo mal? – cuestiono angustiada la rubia ¿habia entendido mal las señales? ¿solo ella habia sentido esa magia, esa chispa que surgió en el momento en que juntaron sus labios?
- no Kara, no hiciste nada mal, no es eso. – se apresuro a decir la pelinegra, Kara no tenia la culpa, ella habia sido quien la habia besado de vuelta ¿en que demonios pensaba? En que la amas, boba, se respondió así misma.
- ¿en serio? Porque parece todo lo contrario. – respondió desconfiada de que la pelinegra le estuviera diciendo la verdad, no se pudo hacer equivocado ¿o sí?
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- ¿sabes? no sé qué es lo que me pasa contigo Kara. – mentira, era obvio lo que sentía por la rubia. – cuando te tengo cerca, me olvido de todo, todo a mi alrededor desaparece, haces que no me importe nada, haces que desee estar contigo, aun cuando eres mujer... - se cayó, eso ultimo no debía salir de sus labios, el rostro de la rubia lo decía todo.
- ya veo. – fue la escueta respuesta de la rubia, no sabia que decir esa situación pese a que era la segunda vez que pasaba por ella ¿Qué se decía en esos casos? ¿gracias? Tal vez debería investigarlo.
- Kara, no quise decir eso, déjame que te explique. – pidió la oji-verde cuando la rubia puso distancia entre ellas. – por favor entiéndeme, toda mi vida he estado con chicos, no puedo estar contigo, a mí me gustan los chicos, no sé qué me pasa contigo, tengo miedo de todo esto, no sé cómo debo enfrentarlo, yo... - explicaba un poco desesperada al ver la postura defensiva que habia adoptado la rubia.
