María José Garzón siempre ha tenido dos cosas muy claras en su vida:
1- Está locamente enamorada de su mejor amiga.
2- Ella no le corresponde.
¿Qué pasaría si un día su gran secreto sale a la luz?
¿Daniela le corresponderá?
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Volvieron a Bogotá. Las navidades pasaron rápido al igual que el cumpleaños de Calle, esta fue completamente feliz al estar rodeada de sus familiares y amigos, pero sobretodo, al estar con Poché.
Fue un poco triste el tener que viajar a Miami a causa de una entrega de premios el 1 de enero y perderse el fin de año junto a la familia, pero era su trabajo y no podían cambiarlo. Aun así, lo pasaron bien entre amigas.El 2 de enero volvieron a casa para seguir trabajando.
La vida era demasiado buena, Mari seguía inmersa en los preparativos de su boda, al igual que la nueva portadora de un anillo de compromiso, Abi, que ahora si no paraba de hablar de iglesias y arreglos florales.
Calle y Poché disfrutaban la una de la otra, no había ningún punto de felicidad que no lograrán alcanzar juntas.
Aquella noche, Calle había insistido en salir a dar un paseo, quería pasear de la mano junto a Poché mientras se reprimía las ganas de besarla. Llegaron a un pintoresco restaurante del centro.
-¿Tienes hambre amor?- Preguntó Poché sin apartar la vista del cartel del restaurante.
-Cariño, sabes que si- Poché sonrió.
Rieron como un par de locas antes de entrar en el restaurante.
-Una comida deliciosa Gorda- Sonriendo.
-En tu compañía, aun mejor- Calle la tomó de la mano sonriendo.
-Que cursi eres- Se echaron a reir- Me encanta- Fue en ese instante cuando Calle notó que Poché le enviaba esa típica mirada de película romántica, esa que te llega al alma, esa que te enamora más.
-Amor, voy un momento al baño- Poché se levantó de la mesa con una sonrisa.
-Tú y tu vejiga pequeña- Rieron.
-Toda yo soy pequeña- Con voz de niña pequeña.
-Eso es lo que te hace tan cute amor- Rieron nuevamente- Anda ve, o no te dejaré marchar y te harás pis en los pantalones.
Poché se marchó sonriendo, Calle empezó a mirar algunas noticias en su instagram, cuando sus pensamientos fueron interrumpidos por la voz conocida de un hombre.
-Daniela Calle- La chica levantó la vista para encontrarse con el numero uno en su lista de indeseables, Johann Vera. Sonrió decepcionada.
-Hola Johann- Alegó resoplando.
-Cuanta emoción, por favor, controlate- Alegaba con sarcasmo mientras se sentaba- ¿Te importa que me siente?
-Ya lo has hecho- Johann dejó escapar una carcajada.
-Daniela, se que he sido un capullo, más que eso, un tremendo idiota.
-No te detengas por favor- Burlona- Es la conversación más sincera que hemos tenido en meses.
