El segundo gobernante

Capítulo 47: Conversaciones Pendientes

Lucifer decidió hablar con Alastor sobre su tardanza. No quería que hubiera secretos entre ellos, especialmente ahora que estaban esperando un hijo juntos. Así que, después de tomar su jugo de fresas, se dirigió a la habitación de Alastor.

_ Alastor, necesitamos hablar _ dijo Lucifer al entrar en la habitación.

Alastor, que estaba sentado en su escritorio, levantó la vista y sonrió al ver a Lucifer.

_ Por supuesto, Lucifer. ¿Qué sucede? _ preguntó Alastor, su sonrisa nunca desapareciendo.

Lucifer se sentó en la silla frente a Alastor y respiró hondo antes de hablar.

_ Estoy molesto porque no me informaste que te demorarías en el Anillo de la Pereza. Me preocupé por ti _ confesó Lucifer, mirando a Alastor a los ojos.

Alastor pareció sorprendido por un momento antes de que su sonrisa se desvaneciera y fuera reemplazada por una expresión de indiferencia.

_ No pensé que fuera necesario. No fue nada importante _ respondió Alastor con un encogimiento de hombros.

Lucifer frunció el ceño, un poco molesto por la respuesta de Alastor.

_ Puede que para ti no fuera importante, pero para mí sí. Me preocupé por ti, Alastor _ insistió Lucifer, su tono de voz firme.

Alastor lo miró por un momento antes de suspirar y asentir.

_ Entiendo, Lucifer. Tendré eso en cuenta para la próxima vez _ dijo Alastor, aunque no parecía particularmente arrepentido.

Lucifer asintió, aunque no estaba completamente satisfecho con la respuesta de Alastor. Sin embargo, decidió dejarlo pasar por ahora. Después de todo, no quería empezar una pelea.

_ Gracias, Alastor. Solo quiero que seamos honestos el uno con el otro, especialmente ahora que vamos a ser padres _ dijo Lucifer, poniendo su mano sobre su vientre.

Alastor asintió, su sonrisa volviendo a su rostro.

_ Por supuesto, Lucifer. Seré más considerado en el futuro _ prometió Alastor.

Con eso, Lucifer se sintió aliviado. Aunque no estaba completamente satisfecho, se sentía mejor después de hablar con Alastor sobre sus preocupaciones.

Mientras tanto, Husk estaba en la cocina, preparando la cena había decidido quedarse esa noche en el Palacio.

Aunque no era su trabajo, disfrutaba cocinar y era bueno en ello no solo para preparar bebidas. Además, le daba la oportunidad de despejar su mente y relajarse.

_ Espero que a Lucifer le guste la cena _ murmuró Husk para sí mismo mientras cortaba las verduras.

La noche continuó sin problemas, con Lucifer y Husk disfrutando de la cena juntos Alastor no los pudo acompañar a cenar esa noche eso puso a Lucifer un poco triste había pasado mucho tiempo desde que habían cenado juntos o incluso pasado tiempo juntos las únicas veces que podían estar juntos era cuando dormía pues lo hacían en la misma habitación.

Husk sintió un poco de tensión en el ambiente al igual que la expresión un poco deprimida de El soberano del infierno

_ entonces, ¿pudiste conversar con Alastor? _ pregunto Husk

_ si pero no sirvió de mucho solo logré que siguiera " lo tomaré en cuenta para el futuro" ... Y eso realmente me hace sentir mal _ pequeña anécdotas saladas cayeron por las mejillas de lucifer

Eso hizo enfurecer a Husk ese idiota total lo iba a escuchar

Se levantó ese asiento y abrazó con cuidado a lucifer

_ tranquilo no es bueno para el bebé _ Husk trato de consolarlo damdole en un abrazo cálido envolviéndolo también como sus alas

Ya era hora de dordormir y lucifer estaba listo con su pijama acostado en la cama dando pequeñas caricias a tu vientre hasta que escuchó la puerta abriéndose lentamente sabía quién era y solo continuó con lo que estaba haciendo

Alastor usando sus poderes se cambió de ropa a una más cómoda para dormir

Embolvio a lucifer entre sus brazos como ya era costumbre pero sintió el cuerpo más pequeño moverse en señal de incomodidad eso era estraño lucifer nunca se a alejado a su toque o sus caricias

Eso no le gustó

Una disculpa si encuentran alguna falta de ortografía