Capítulo 18: El compromiso en el bosque infernal

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Hacía unos días que Lucifer no se había sentido nada bien, y era extraño pues nunca había sucedido. Sus heridas físicas siempre sanaban rápido y el dolor era momentáneo, desaparecía tan rápido como llegaba, pero esto debía ser algo diferente.

Se hizo algunas pruebas y no podía creerlo, estaba en cinta. Sabía vagamente sobre la capacidad de su cuerpo para poder engendrar vida, pero aún así no pudo evitar sorprenderse y, por primera vez, sentir miedo. Ni en su destierro había sentido miedo.

Por supuesto, sabía quién era el otro padre de su bebé, con el único ser que había tenido intimidad y el único que le provocaba deseos tan carnales y pervertidos.

Debía decírselo y esperaba que el demonio de la radio se lo tomara bien y no lo rechazara.

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Y por suerte, no fue así. Alastor tomó relativamente bien la propuesta de matrimonio y la confesión del embarazo.

Le causó un poco de gracia cuando Alastor le dijo que quería ser él quien le pidiera matrimonio adecuadamente y, de hecho, se estaba preparando para reunirse con él. Sabía que esa noche Alastor le pediría matrimonio y quería verse radiante y sensual para él.

Llegó a donde lo había citado Alastor, era en los bosques del infierno, los cuales eran siniestros y muy perturbadores, pero si sabías apreciarlos correctamente, tenían una belleza y encanto único.

Se encontró con Alastor, el cual besó sus nudillos y lo dirigió a lo profundo del bosque, donde había una cabaña rústica y muy linda.

_ Su majestad_ dirigió la vista hacia Alastor, el cual se había arrodillado sobre una pierna y sostenía su mano izquierda. "Hágame el honor de aceptar ser mi esposo". No pudo evitar que su corazón latiera de manera rápida y que un sonrojo se pintara en sus mejillas.

_ Por supuesto que acepto_ Alastor colocó un lindo anillo dorado en el dedo correspondiente y besó nuevamente su mano para levantarse lentamente y ambos fundirse en un abrazo.





El segundo gobernante Donde viven las historias. Descúbrelo ahora