Capítulo 24: Los Celos de Alastor

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Walker pertenecía a una línea descendiente directamente de Lilith, y su familia había mantenido una relación cercana con Belcebú. Por lo tanto, él y Lucifer también tenían una relación cercana debido a su conexión familiar.

En esa reunión, Walker hablaba de trivialidades, algo que normalmente no le molestaría a Lucifer. Sin embargo, últimamente estaba muy irritable y no quería desatar su ira con alguien que no se lo merecía.

Pero en un instante, Lucifer sintió la presencia de su prometido, lo cual lo puso de muy buen humor. Permaneció con una sonrisa durante toda la reunión y fue más amable con Walker. El demonio interpretó esa amabilidad como una señal de que Lucifer estaba disfrutando de la reunión, por lo que esta se extendió más de lo esperado.

Sin embargo, Lucifer podía sentir la presencia de Alastor, lo cual lo ponía ansioso. Quería terminar con todo y estar solo con su amado demonio ciervo.

_Walker, he disfrutado de esta reunión, pero como te comenté, tengo otros asuntos que atender. Lamento tener que terminarla_ dijo Lucifer tratando de ser lo más amable y educado posible.

_Por supuesto, yo también tengo que retirarme. Pero espero poder reunirnos otra vez, su majestad_ respondió Walker atreviéndose a dejar un beso en la mejilla de Lucifer. Fue un gesto repentino que dejó a Lucifer pasmado, sin saber cómo reaccionar.

En ese momento, cuando Walker se fue alguien lo volteó bruscamente, lo cual enfadó a Lucifer.

Sin embargo, al darse cuenta de que era solo Alastor, se relajó y mostró una radiante sonrisa, intentando abrazar al demonio ciervo. Pero fue rechazado.

_ Cariño, ¿qué sucede? ¿Por qué no quieres darme un abrazo?_  preguntó Alastor desconcertado.

_ ¿Quién era él?_, preguntó Alastor con enojo evidente en su voz. La estática de la radio se escuchaba más fuerte con cada palabra, indicando su creciente enfado.

_ No le des importancia_, intentó tranquilizarlo Lucifer, volviendo a intentar abrazarlo. Pero nuevamente fue apartado, lo cual entristeció a Lucifer.

_¿Por qué se te acercaba tanto? ¿Qué clase de relación tienes con ese estúpido demonio?_, preguntó Alastor, cada vez más enfadado. Su figura se hacía cada vez más alta y aterradora.

_Te lo he dicho, no le tomes importancia. Su familia es muy cercana a mí, así que podríamos decir que tenemos una relación íntima_, explicó Lucifer de la mejor manera que pudo.

_Pues no me agrada. No quiero verte cerca de él, ni de nadie más_ afirmó Alastor con determinación.

_No tienes que preocuparte por él, ni por ningún otro demonio. Tú sabes que eres el único ser que puede tocarme y estar a mi lado_ aseguró Lucifer.

_Eso espero_ respondió Alastor, reafirmando su desagrado por la cercanía de Walker.

_No sabía que podías ser tan celoso_ dijo Lucifer con una voz melosa mientras se acercaba lentamente a Alastor.

Alastor solo lo observaba acercarse. ¿Celoso? Ja, debía ser una estúpida broma. Él nunca había sentido eso antes, y no lo sentiría por nadie.










El segundo gobernante Donde viven las historias. Descúbrelo ahora