La Mejor Actuación | Ineffable Husbands

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Entré en personaje automáticamente, bueno, no era tan necesario, siempre estar cerca de él me ponía tan nervioso como si fuera su novio real, que nunca iba a ser.

No le dije nada sobre el cansancio, intenté sonreír y aparentar que todo estaba perfectamente bien conmigo.

— Bueno, vamos a comer. — tomó mi mano, mirándome y asentí con una sonrisa.

Quería reírme de mí mismo por lo ridículo que me sentía, fingiendo no estar cansado solo para estar cerca de él.

Esa vez, agradecí que en el auto él mirara su teléfono, porque así no iba a notar que me estaba muriendo, literalmente, de sueño.

Al entrar al restaurante que ya estaba reservado, me llevó de la mano hasta la mesa, dejé de oír, él pidió la comida y yo me quedé mirando al vacío, sintiendo que el peso de mi cabeza me ganaba,

— ¿David? —

— ¿Sí? Dime — dije rápidamente de manera para nada sospechosa.

— ¿Estás... bien? —

— Claro. — le dije con una sonrisa, me miró como si me estuviera analizando.

Mi sonrisa se borró instantáneamente cuando la comida llegó, de solo verla sentí un instinto de incertidumbre, mucho miedo de pronto e indecisión repentina.

Traté de comer algo, no quería rechazarlo, pero, era difícil.

— ¿No tienes mucha hambre? — me preguntó.

— Es que comí algo hace unas horas y... — no supe que más decir, pero para mi fortuna apareció un flash repentino en ese momento, interrumpiendo mi inexistente excusa para no tener hambre, venía de afuera del restaurante, eran fotógrafos.

— No te preocupes. — me dijo — La seguridad del lugar les pedirá retirarse. —

— E... está bien. — no sabía qué decirle, se veía tan atractivo que ni siquiera me atrevía a mirarlo por más de dos segundos porque su imagen se quedaría impregnada en mis ojos.

— Tenemos que ir a mi casa. — dijo.

— ¿Qué? —

— Sí, así verán que pasaras la noche conmigo. — me puse nervioso de solo pensarlo.

— ¿En verdad estás bien? —

— ¿Recuerdas lo de 'celebrar'? — pregunté con extrañeza.

— Oh, ahora entiendo. — me dijo, ¿Riéndose? 

¿Estaba riéndose de mí?

— Por eso tus ojos se ven terribles. — me sonrojé al oír eso — David, casi no comiste nada... — me repitió, me sentí inquieto.

— Pero ya comí, hace unas horas... de verdad... —

Minutos después me despierta la sensación de alguien tocándome el hombro, me asusté.

— ¿Vas a dormir toda la noche en el auto? —