El ave fénix de la mafia

Capitulo 43

Xiana

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Por más que trato no logro conciliar el sueño , pasan horas y aún sigo acostada sobre él en la misma posición cierro los ojos por un par de minutos pero no tengo ni una pizca de sueño , Cárter si logro dormirse , algo que es bueno ya que desde la isla no hemos dormido . Estoy sobre el , quiero levantarme pero no quiero despertarlo.

Me quedo quieta por un momento acariciando su pecho con la punta de mis dedos disfrutando de sentir su calor . Dormir sobre él se me hace más cómodo que dormir en la cama , estar entre sus brazos me hace sentir segura.

Poco a poco y con cautela voy retirando el brazo con el que rodea mi cintura , es fuerte y su musculatura pesa , lo hago sigilosamente hasta que por fin consigo quitarme su brazo de encima.

Hace un ademán de levantarse y me dejó de mover.

Alcanzo a ver cómo aprieta los puños y mueve los párpados varías veces como si algo le molestara o estuviera teniendo una pesadilla , no abre los ojos pero mueve la cabeza de un lado a otro una sobre la almohada una y otra vez , dice algo inaudible que no logro entender y su respiración se torna ruidosa , me quito de encima de él y me quedo sentada a su lado preguntándome si sería conveniente despertarlo .

Le acaricio la cara , es lo único que se me ocurre hacer .

Abre los ojos de repente y se sienta de golpe sobre la cama , respira como si le faltase el aire .

—Tranquilo.—le acarició la cara y limpió los sudores de su frente.

Me mira extrañado.

No pregunto nada y solo lo abrazo. No me corresponde al abrazo pero igual no lo  suelto. Le acaricio el cabello y mantengo el abrazo escuchándolo respirar.

Quisiera poder estar para él como él lo está para mí pero no me dice las cosas y no es capaz de decirme como se siente. Maldice en voz baja y aprieta los puños con los nudillos enrojecidos.

Dejo de abrazarlo y fijo los ojos en los suyos , la intensidad de sus ojos color miel es mucha , en su mirada hay algo que no me dice pero que parece perturbarlo .

No dice nada y solo se levanta , toma una cajetilla de cigarrillo de la mesita de noche y sale hacia el balcón.

Saco los pies de la cama , me pongo unas pantuflas y me encamino a la puerta del balcón , no salgo si no que me quedo parada en la puerta observándolo desde adentro y el está parado de espaldas a mi fumándose el cigarrillo , está haciendo bastante frío y esta sin camiseta.

Escucho una música que viene del jardín al parecer aun están festejando.

Termino de salir de la habitación y me paro delante de él, me mira fijamente a los ojos y le mantengo la mirada tratando de descifrar que es lo que le pasa. Tengo mil preguntas pero no quiero hostigarlo y mucho menos ser imprudente.

—¿Estas teniendo pesadillas ?—le pregunto.

Expulsa el humo que tiene en la boca y apaga el cigarrillo con su dedo.

—Todo bien , no tienes de que preocuparte .

—¿Todos bien?—inquiero por que aunque el lo niegue se qué hay algo que lo perturba por más que diga que "todo bien" .

—Todo bien.—repite aun con el gesto de seriedad.

Me repara en silencio.