𝚃𝚑𝚎 𝚠𝚘𝚛𝚕𝚍'𝚜 𝚗𝚘𝚝 𝚜𝚊𝚏𝚎 𝚊𝚗𝚢𝚖𝚘𝚛𝚎 ᴸᵃʳʳʸ ˢᵗʸˡⁱⁿˢᵒⁿ

Capítulo cuarenta

"Stand by... ¿me?"

...

Louis fumaba fuera del edificio donde se encontraba su despacho. Al menos llevaba medio paquete y su ansiedad no disminuía. Solo podía pensar qué estaba ocurriendo en aquella habitación. ¿Simon le estaría tratando bien?, ¿tendría la osadía de siquiera mirarle con ojos golosos?.

Miraba el reloj y las manecillas se movían tan lentas que pensaba que se había detenido el tiempo, o que el universo le estaba gastando una cruel broma. Podía admitir que se merecía sufrir, lo admitió desde el primer momento en el que se convirtió en uno de los más grandes capullos, pero Harry... Louis daría lo que fuera con tal de no ver un ápice de sufrimiento en esos ojos.

Era un engreído, era egoísta, avaricioso y la mayoría del tiempo actuaba sin saber lo que estaba haciendo, pero si su comportamiento de mierda iba a arrastrar a Harry consigo, el odio que sentiría por si mismo aumentaría al puro desprecio.

Cuando quiso darse cuenta, arreguñaba la caja de cigarrillos en un puño y su rostro estaba tan sumamente tenso que se instaló un dolor punzante en su cabeza.

A penas supo reaccionar cuando notó una mano posarse en su hombro. Su primer pensamiento fue lanzar un puño a quien le agarraba, eso era lo único que le provocaba la imagen de Cowell en su cabeza, sin embargo, tan solo se puso tenso.

—¡Louis!, Louis soy yo — le intentó tranquilizar Payne, agarrándole de los hombros y mirándole a los ojos. La mirada de Louis estaba desencajada.—Está todo bien hermano, soy yo.— la mano del castaño se posó con cariño en la mejilla del líder.

Louis despertó de su trance. Su realidad se veía nublada por el odio y la sed de venganza, hacía tiempo que no se sentía de esa forma.

Después de unos segundos el castaño lo notó más receptivo, así que continuó hablando.

—Ya han terminado de hablar. Simon quiere sacarle del despacho.

Louis volvió a fruncir el ceño.

—Nunca es suficiente para él.— murmuró completamente hastiado de toda aquella situación.

—No permitiré que se sobrepase, Louis.

—Quiero ver a Harry, ¿le has visto?, ¿está bien?.

Liam le sonrió y pasó su brazo sobre sus hombros, incitándole a subir al despacho.

—Ven, volvamos dentro.

...♔ ♔ ♔...

Caminaron juntos, Liam le abrazaba a la altura de los hombros, dándole las fuerzas que le faltaban en aquel momento para enfrentarse de nuevo a Simon. Ninguno podía mentir, ese maldito bastardo era agotador, pues su mera presencia ya te instalaba un temor indescriptible en el pecho y era tan astuto, que se te metía en la cabeza como un parásito. Lograba convencer a cualquiera con un poco de labia y su gran facilidad por infundir miedo.

En cuanto Louis pisó aquel pasillo, aceleró el paso hasta la puerta de su despacho. Cuando a penas quedaban un par de metros para llegar, Harry salió de la habitación, parecía entero, no tenía golpes ni marcas significativas, sin embargo, algo en su rostro estaba diferente. Su energía se sentía diferente.

Louis lo topó de frente y sin pensarlo dos veces, llevó sus manos a las mejillas del rizado, intentando observar desde cerca su rostro y también obligándole a que le devolviera la mirada.

—¿Estás bien?, ¿Te ha hecho algo? — preguntó, pero no fue Harry quien respondió.

En ese preciso momento, Simon salió de la habitación y se colocó detrás de Harry, apoyando una mano en su hombro.