FINAL ALTERNATIVO:
PARTE II
Luego de almorzar dormí unas cuantas horas para descansar. Cuando desperté tomé una ducha y me cambié lo más cómoda posible para bajar encontrándome con quien sería mi chófer aquella noche.
—Buenas noches André. —le sonreí y me devolvió el gesto.
—Buenas noches señorita. Por favor. —abrió la puerta para que subiera y agradecí.
El camino fue silencioso y en él debatía algunos pensamientos acerca de mi futuro. En un momento regresé a la realidad observando que las ventanas comenzaban a empañarse con algunas gotas.
—¿Está lloviendo? —pregunté observando el trayecto y estábamos prontos a llegar en las puertas de la casa.
—Si, señorita. El pronóstico dice que toda la semana estará así. —informó y asentí.
Al llegar, alguien abrió la puerta desde afuera y para cuando me bajé encontré a Lucio, parado y sosteniendo un paraguas para que no me mojara.
—Bienvenida. —me ofreció la mano y la tomé, notando la calidez que emanaba, muy diferentes a las mías que habían sido embargadas por el frío de la lluvia.
—Buenas noches. —sonreí, acompañándolo adentro donde Micaela me recibió.
—Bienvenida. —me abrazó con una sonrisa muy animada.
—Gracias. —le devolví el gesto y me miró de pies a cabeza.
—No sé por qué te imaginaba abatida, pero te ves espléndida. —tomó mi mano para que girara y me avergoncé un poco, ya que su hermano no me quitaba la mirada de encima.
—Quizas sea porque me siento libre. —abrí un poco los brazos.
—Libre... —repitió mirándolo. —¿Escuchaste eso hermano?
—Lo hice, fuerte y claro. —respondió dirigiéndose al comedor y me extrañó esa actitud.
Por un momento sentí tristeza, pero sabía la razón. La verdad era qué no me creía especial en su vida, pero sabía que lo había lastimado de algún modo.
—¿Y bien? —pregunté tomando mi lugar en la mesa. —¿Cual es el motivo de ésta cena?
—¿Es una broma? —Micaela sonrió. —Para celebrar tu triunfo, tanto a tu favor como por haber derrotado al desgraciado de Sebastián, una vez más. —levantó su copa de vino. —Tambien concluiste la historia de tu ex, en resumen, un brindis por la venganza.
—¿Por la venganza? —cuestionó su hermano con una sonrisa y me miró. —¿Te agrada ese término?
—No hay otro modo de llamarlo, así qué sí, por la venganza. —me uní al brindis.
—¿Que harás ahora? —preguntó Micaela y no supe cómo responder.
—Buena pregunta, y me gustaría tener la respuesta. —desvié la mirada haciendo un bocado.
—¿No pretendes regresar a Londres? —me preguntó Lucio y lo miré, hice una mueca de no conocer la respuesta y sonreí levemente sintiendo qué no tenía lugar a donde ir.
—No lo sé, lo pensaré. Tomaré mi tiempo. —desvié la mirada y su hermana dibujó una sonrisa en su rostro.
—¿Que más da? —cuestionó. —Te quedarás en Italia el tiempo que quieras, no importa, sabes que cuentas con nuestra absoluta protección.
Escuchar eso me aliviaba y tranquilizaba mi inquietud por un momento, pero sabía que no era suficiente para sentirme a gusto.
A la hora de retirarme la tormenta había ganado fuerza e intensidad, impidiendo que me marchara.
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ENTRE TUS BRAZOS |+18| [COMPLETA]
Romance~~Cuanto tiempo sin vernos, cuánto tiempo sin saber de ti. Desde que me fui sé que fuiste feliz, aunque en un principio todo fue igual para mi; sentí que mis días se convirtieron en grises debido a la lejanía pero fue la mejor opción a tomar~~ Aquel...