4 de enero de 1988
-¿Que haces aqui?- dije nerviosa.
-Venia a pedirte perdon, Michelle.
-Perdona, pero yo ya no.....- vi como su cara se tornaba en un gran enojo mientras yo escuchaba como alguien venia riendo.- Ya no quiero estar contigo, Steffan, adios.- quise cerrar la puerta pero este fue mas rapido y la abrio, senti como mi mejilla era golpeada por su mano.
-¿¡Que mierda crees que haces, idiota!?
-¡Que sorpresa, el emo!- rio pero cuando menos lo espere este estaba en el suelo noqueado.
-¿¡Estas bien!?- tomo mi rostro y lo examino atentamente para luego abrazarme.
Mientrastanto Izzy arrastro a Steffan, con ayuda de Slash, al sofa para que despierte, obviamente no lo ibamos a dejar tirado en la puerta. Menos mal que mi madre no esta, porque se hubiera tragado varias denuncias de su parte. Mientras tanto Izzy puso una bolsa de hielo en mi mejilla, estaba tan roja como un tomate, veia atentamente lo que hacia Slash, nada, solo miraba la TV con una cerveza en la mano. Veia como sus labios esbozaban una amplia sonrisa mientras reia, estaba viendo una de sus peliculas favoritas, El exorcista. Tenia unas ganas incontrolables de ir corriendo a besarlo sin que nada importe. Todo esto son solo impulsos que quisiera hacer, pensamientos impulsivos, porque se suponia que ya lo habia olvidado por completo, ademas, esta enamorado de alguien mas que tan solo le lleva tres años de diferencia, que suertuda eres, Renee, tienes al amor de tu vida y te vas con cualquier idiota.
-Mañana nos iremos a Los Angeles.- solto repentinamente Izzy.
-¿Que?- dije con tristeza. -¿No se iban en tres meses?
-No, mañana es. -el rizado sonrio con alegria
-Bien, esto algun dia tenia que pasar, ademas ustedes son mucho mayores a mi, con mas razon iba a pasar.- dije viendo a la nada. Izzy levanto mi rostro tomandome del menton mientras sonreia y veia mis ojos atentamente.
-No es un adios, es un hasta luego. - solo pude abrazarlo, en serio iba a extrañarlo, digo, extrañarlos. A los dos, pero Izzy era mi mejor amigo, la unica persona que esta para mi.
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5 de enero de 1988
Tenia puesto unos jeans tiro bajo, zapatillas y una blusa pegada al cuerpo, esperabamos en las bancas del aeropuerto, a lo lejos pude ver un rubio bastante alto corriendo hacia nosotros. Al llegar oí su suspiro de alivio.
-Hasta que llegas, estupido, siempre llegas tarde.
-Perdoname, don puntual. - rodo los ojos y pude sentir su incomoda mirada posada en mi.-¿Quien es ella? ¿Viene con nosotros?
-Asi quisiera, pero no. - dije con una pizca de tristeza.
-No te preocupes, ya podras venir algun dia, ¿Por que no podras venir?
-Primero que todo, tengo 17 años y mi madre me mataria si no termino el colegio, segundo no tengo dinero, tercero, y ultimo, si voy con ustedes tendria que venir la pesada de mi hermanastra para que me cuide, ya saben, soy menor de edad.
-¿¡Ella es la menor que te cojiste!?- solto y mire con enojo a Izzy- ¿¡Como te llamas!?
-Michelle.
-¡Eres un idiota, Mckagan, dije que tenia 18 años! - dijo con enojo. - Ademas nunca me acostaria con ella, es mi mejor amiga, nada mas..
-Oh, bueno, tal vez la conozca algun dia.
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𖦹𝐴 𝑆𝑒𝑐𝑟𝑒𝑡 (Slash)
Romance☆ 𝑈𝑛 𝑎𝑚𝑜𝑟 𝑛𝑜 𝑐𝑜𝑟𝑟𝑒𝑠𝑝𝑜𝑛𝑑𝑖𝑑𝑜 𝑝𝑢𝑒𝑑𝑒 𝑑𝑒𝑠𝑒𝑚𝑏𝑜𝑐𝑎𝑟 𝑢𝑛𝑎 𝑣𝑒𝑟𝑑𝑎𝑑𝑒𝑟𝑎 𝑜𝑏𝑠𝑒𝑠𝑖𝑜𝑛. 𝐿𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑛𝑜𝑠 𝑙𝑙𝑒𝑣𝑎 𝑎 𝑒𝑠𝑎 𝑠𝑒𝑛𝑠𝑎𝑐𝑖𝑜𝑛 𝑑𝑒 𝑠𝑒𝑛𝑡𝑖𝑟𝑠𝑒 𝑠𝑜𝑙𝑜, 𝑑𝑒 𝑡𝑟𝑖𝑠𝑡𝑒𝑧𝑎, 𝑚𝑒𝑙𝑎𝑛�...