𖦹𝐴 𝑆𝑒𝑐𝑟𝑒𝑡 (Slash)

𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 68 𝙎𝙇𝘼𝙎𝙃'𝙎 𝘿𝘼𝙐𝙂𝙃𝙏𝙀𝙍

Había pasado bastante tiempo desde que habíamos vuelto a casa, y si les soy sincera fueron las noches más difíciles de mi existencia. A veces no sabía por qué razón lloraban y eso me abrumaba bastante, aunque Izzy fue de una ayuda muy grande. Estaba pensando en llamar a los chicos y darles la noticia, pero no estaba segura. Aquellos bebés hermosos que había tenido tenían cinco meses de nacidos, había pasado exageradamente rapido

—¿Salimos a dar un paseo? Les hará bien respirar aire fresco.—propuso el pelinegro acostado jugando con aquel bebé regordeto que se agarraba los piecitos mientras reía.

—Me encanta la idea. —dije mientras le hacía cosquillas a Amanda. Está reía graciosamente.

Los dos nos quedamos en silencio.

—Izzy..—atraje su atención.—¿Alguna vez pensaste que esto iba a pasar?Y si no hubiera sido así, ¿Cómo sería?

—Sinceramente, no tenía tanta fé, bueno, yo no me tenía fé. Estar asi, contigo, era un sueño frustrado, y si jamás hubiéramos pasado, no tendríamos a estos lindos bebés con nosotros.—hizo voz tierna y rei.

—Tienes razón. —Sonrei. Pude oler un pañal sucio, otra vez.—Ay Amelia, ¿Que comes?—reimos. 

Finalmente le cambié el pañal a la princesa de la casa, un vestido lila con un liston color violeta. Por su puesto medias, aunque no le gustaban y se las terminaba sacando. Y bueno, a Dean lo cambia Izzy. Un bodie color blanco con el logo de los Guns N' Roses, unos pantalones, chaleco negro y sus medias. Pusimos los cochecitos en el auto antes de salir y las cosas necesarias por si se ensucian o tienen hambre. Yo tenía unos zapatos polares color negros, enterizo color gris con un cinturón negro y una camisa color blanca. Por su puesto mis lentes de sol.
Yo tenía a mis dos bebés en brazos, estos veían atentamente el paisaje, las aves, las nubes, bueno, y el sol casi que no, me dió gracia como se molestaron por el sol. Pusimos la radio, justamente tenía la canción favorita d los dos,  You could be mine. Estos movían sus bracitos y reían.
Estos bebés eran inquietos, como su padre.
Y como siempre, dejamos el auto en el estacionamiento. Izzy bajo los cochecitos y los armó. El tomo el de Dean y yo el de Amanda.
Paseamos por el parque, por la calle, por muchos lugares. Hasta llegar nuevamente a aquella tienda de discos.

—¡Wow! ¡Entonces es cierto!—dijo el vendedor.

—¿Que cosa?—pregunte.

Este señaló aquella revista, pude imaginar lo que decía, y pude imaginar a Axl y los chicos leyendola.

“Izzy Stradlin y Michelle Anderson padres de dos lindos niños 'Dean y Amelia'.”

Solté una carcajada por la cara de Izzy, dónde estaba algo asustado.

—¿Es cierto que se casarán?—pregunto el rubio de largos cabellos.

—Si, es cierto.—sonreimos.

—¡Felicidades! Y también felicidades por los bebés, son muy tiernos.—dijo al ver a los pequeños mientras jugaban con sus pies o quedaban sentados viendo aquel lugar.

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Slash.

Estaba triste, destrozado, deje ir a la mujer que realmente amaba, fue un grave error casarme con Renee, debí hacerle caso a Steven, ella nada más me quería por mi dinero.
Ya hace unos meses que Renee y yo íbamos de mal en peor, casi todos los días nos peleabamos, aunque siempre lo “arreglabamos” cogiendo.
Tenía tanto miedo de acabar mal, estaba hundido en mis penas, las drogas fueron mi único hogar cálido en el cual me había refugiado.
Al ver aquellas imágenes de Izzy Y Michelle besandose y siendo pareja me hacía sentir extremadamente celoso, aunque merezco no estar con ella, yo no merezco su lealtad y amor.
Hasta había un rumor de que se iban a casar, no dudo que ya lo estén.
Creo que este es mi peor karma, sufrir lo que yo le hice a ella, y me lo merezco.

—Hermano, tienes que salir algún día. Tu hija te necesita.—Si, había tenido una hija, Lourdes, ella era mi rayo de sol en mis días obscuros. —Deja de drogarte y estar de borracho todo el día, ella no merece que su padre esté en eso, hazlo por ella, y por ti.—Dijo con pena el pelirrojo.

Todos los días los chicos rogaban para que salga de mi habitación, o otras veces cuando Lourdes venía se quedaban todos aquí, a hacerme compañía, pero siento que es para cuidar a la niña, porque soy un estúpido cuidando niños.
No me quiero imaginar cuando el bebé que viene en camino nazca, soy un desastre como padre, si tan solo mi madre estuviera aquí..