𖦹𝐴 𝑆𝑒𝑐𝑟𝑒𝑡 (Slash)

𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 26 ¡𝙏𝙀 𝘼𝙈𝘼𝘽𝘼!

Michelle.

—¡Matare a Axl! —dije.—¡No me dijo que ya había salido!—mi tono era molesto.

—¿No te importa que los demás lo hayan visto?

—No, no me importa.

Error, si me importaba todo, es mas, todo me afecta. Pero como dijo Pamela, hay que engañar a la mente.
Trate de hacerlo siempre y la verdad me funcionaba en ciertas ocasiones, y está vez era la ocasión.
Además había salido “de infarto”, como dijo Axl. Mucho no me importaba.

—Pero...

—¡No hablemos más del tema! Vamos.. Que estamos llegando tarde..

Dije. Subimos por el ascensor y entramos a nuestro salón.

—Hasta que llegan, señoritas.— dijo el profesor.—Tomen asiento.

Eso hicimos. No pude evitar ver a cada uno de los que estaban allí, y lo que veía era; risas, susurros..
Sentía que todos parecían niños de secundaria.
Bufe y rodé los ojos.

—Eres una zorra, Michelle.—Susurro alguien atrás mio. Nancy, era una fanática de los Guns y desde que supo que eran mis amigos empezó a tirarme las malas vibras.

—¿¡Disculpa!?—Dije exaltada haciendo llamar la atención de todos.—¡No soy una zorra!

—Lo eres por mostrar todo tu trasero por dinero. Eso hacen las zorras..

—Si, claro. Te mueres de envidia porque yo si puedo estar cerca de tu prestigioso “Axl Rose”.

—¡Mentira!

—¡Cállate! ¡Desde que entre a esta universidad de mierda dices idioteces de mi! ¡No te soporto más!

Estaba tan enojada que hasta yo me desconoci, Madison me miró algo sorprendida, jamás me había agarrado este ataque de furia, ni siquiera con Renee. Sentia mi cara hervir, hasta que Madison sobo mi brazo y me dijo que me sentara.

—Bueno, sigamos.

Dijo el profesor un tanto incómodo por la situación. Finalmente la maqueta estaba perfecta, tenía buena resistencia.
Para mí gran suerte tenía esta exposición y ya podíamos irnos a casa, ya que el profesor le surgió un imprevisto, lo normal.

.....

—¡Tu!—dije a paso rápido

—Yo que.

—¡No dijiste que ya habían sacado el nuevo disco, y claro, el vídeo!

—¿Sorpresa?

—Deja de exagerar, Michelle.—comento el pelinegro.

—¿Disculpa? —dije con enojo, la paciencia ya me había colmado por completo de esta situación de mierda.—¡Ahora por eso me tratan de zorra!

—No es nuestro problema, tu aceptaste...

—Tal vez tu cabeza está fallando un poco, pero te recuerdo que tú me convenciste para participar en ello, y no quería decepcionarlos, no quería bajarles la ilusión de sus sueños y quería grabar ese vídeo por ustedes. ¡Me colmas la paciencia Izzy, ya no se cómo tratarte, he estado queriendo hablar contigo, porque si no mal recuerdo eras mi mejor amigo!¿Entiendes el concepto de mejor amigo? ¡Te amaba! ¡Eras lo único que me quedaba luego de que Slash se haya ido con Renee y me deje de lado! ¡Estoy tan cansada de esta situación! —Dije en llanto. Todos se veían animados y algos nerviosos, más Izzy, este reflejaba culpa y algo de incomodidad.

—Bueno, yo..

—¡Tu nada, Izzy!—Dije yendo para mí habitación.

No tenía ganas de seguir viviendo en el mismo edificio que todos ellos. Se me había ocurrido aceptar la propuesta de mi hermana, era ahora o nunca, necesitaba cambios en mi vida, ya estaba cansada, sentía la vida hermosa, pero dolía demasiado.

—¿A dónde vas?—pregunto Emily.

—Me voy. No quiero seguir viviendo con gente corrupta como la que hay aquí. Pamela me espera.

—Pero....

—Es una decisión tomada, Emily. Llamaré.—Tome mi bolso y me fui.
Claro, no sin antes despedirme de las dos mejores personas que quedaban en esta habitación. Duff y Steven.

Salí y me abrace a mi misma con intención de llorar todo el recorrido hacia la casa de mi hermana.
Tome una moneda y pagué para el teléfono público que estaba en una esquina del hotel.

Llamada.

—¡Hey, Pam!—dije desanimada.

—¡Michelle! ¡Es bueno oírte amor! ¿Cómo estas?—su voz sonaba tan dulce y tan acogedora.

—No muy bien..

—¿Que paso?—respondio antes de que terminara.

—Bueno, me pelee con algunos de mis amigos y.... Es una historia larga,¿Podría pedirte un favor?

—Lo que quieras, querida.

—¿Podría quedarme en tu casa está noche? Por lo menos hasta que pueda conseguir otro hogar.

—¿Bromeas? Mi hogar es el tuyo.
Puedes quedarte a vivir hasta que las dos seamos polvo, hermana.—solte una carcajada.—Te paso a buscar, dime dónde estás.

—Fuera del hotel, te espero.

—Bien, adiós, voy para allá.

Colgue y me senté en el suelo apoyandome en las paredes. Mis lágrimas se deslizaban por su solas. Me sentía como un pobre pollito sin su madre, descuidado, solo y con el corazón roto. Mi alma cada vez se apaga más y más, sentia como poco a poco mis pétalos caían y se marchitaban con el paso del tiempo haciendo que sienta un desgarre emocional que nadie podría arreglar jamás. Mis noches se convirtieron en luchas constantes dónde peleaba contra a mi misma. Mi vida era un caos. Salí de mis pensamientos por una suave voz.

—¡Ven, sube!—Sonrei débilmente y subí.

En el trayecto todo estaba en silencio, bueno, estaba la radio, pero fue el único ruido además de la ruidosa ciudad que hacia que me den fuertes jaquecas constantes.
Al llegar llegamos a la gran casa, era totalmente hermosa, la servidumbre era amable y muy respetuosa, amaba cada rincón de este maravilloso hogar.
Hogar dulce hogar.

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Notita: en la conversación
con Izzy cuando decía;
“¡Te amaba!” se refiere
en plan de amigos,
no se le confesó ni nada :)
Besitos.
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