Desperte algo agitada, tenía la garganta seca y tenía un calor insoportable. Algo raro ya que empezaba otoño.
Me levanté y vi que está no parecía mi habitación, ni la del hotel y mucho menos de la casa compartida con Pamela. Tal vez estaba en la casa de alguien más, ya que no recuerdo absolutamente nada de lo que pasó anoche. Que extraño.
Busque en la cocina un vaso y verti agua en el, al darme la vuelta frunci el seño, allí estaba el colorado viendo la televisión.
—¿Axl?
—Que onda, Michelle.—sonrio. —Hasta que despiertas.
—¿Que paso anoche? Luego de la boda de Emily no recuerdo nada. Recuerdo ir al baño y ver todo negro..
—¿Boda?¿Emily? —dijo extrañado.—Anoche fuimos al The Roxy bar, ¿Recuerdas? Sobre todo, no conoces, creo, una tal Emily, ¿Estás bien?
—¿Que?—dije anonada.—¿Que está pasando, Axl? ¿Que es esto? ¿Y está casa de quien es?—Este soltó una carcajada
—En serio,¿Te sientes bien? Es tu casa, tonta, es la casa de la banda.
—Pero... Yo no tengo dinero para comprar una casa así..
—¿Bromeas? Eres Michelle Anderson, amiga, la vocalista de Bikini Kill.
—¿¡Que!? —grite sorprendida.—Dios santo, ¿esto es un sueño?—Toque mi cabeza y corrí mi cabello para atrás, ahí me di cuenta que mi cabello no era rubio platino sino negro total. Axl me miraba un tanto confundido.—Entonces si esto es la realidad...¿Todo fue un sueño?
—¿Que sueño?
—¿Slash va a ser padre? —este rio.
—Slash tiene a Renee, pero no es tan idiota como para dejarla embarazada.—Suspire aliviada. Pero rodé los ojos al saber que estaba con Renee.—Bueno, dejando de lado esto, Tommy llamo diciendo que pasará por ti.—movio sus cejas de arriba a abajo.
—¿Tommy?—Arrugue la frente.
—¿Tommy Lee, tu novio?—abri mis ojos lo más que pude.
—¿¡Y Pamela!?
—Ay Michelle, no tomes más por favor, ya te está haciendo efecto, ¿Recuerdas que Pamela te entrego a la policía diciendo que la golpeabas?—¿¡Que!?—Bueno, tomaste lo que ella más amaba, Tommy, y es tu novio, tonta.—Sonrio.
Dios-mio. Esto si que tiene que ser un sueño, que mierda estaba pasando. ¿Por qué no recordaba nada de mi vida? Carajo, dejare de tomar. Recordé que Axl dijo que Tommy vendría por, así que me duche, deje que el agua caliente recorriera todo mi cuerpo. Se vinieron varios flashbacks, recuerdos antiguos. Recuerdos con los chicos, con Tommy, Pamela y Renee. Renee era dulce y buena conmigo, algo que no logro entender mucho es como nos llevábamos bien y en ese sueño extraño no. Salí de ducharme y me cambié.
☪︎ Michelle.
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Los combine con unos tacones de bota. Estos eran de color negro.
Me puse mi labial cafe, sombras negras con beige y rise mis pestañas.
Axl grito desde la cocina.
—¡Tommy ya llegó, Chelle!
—¡Voy!
Tome mi bolso y salí.
—¡Chelle, amor!—dijo el algo al verme apoyado en su auto. Este me espero de brazos abiertos y poso sus labios en los míos. Me parecía algo extraño pero a la vez me gustaba. Todo fue un sueño.
—¿Cómo estas, Tommy?—sonrei.
—Mejor ahora que te veo.—Sonrio y tiro la colilla de su cigarrillo. Yo le di un beso en la mejilla.
—¿Vamos?
—Si, vamos.—este me abrió la puerta del coche y subí.—Sabes, esos pantalones te hacen ver más sexy de lo que eres, tu trasero se ve tan...
—¡Ya! —rei.—Me da pena.
—¿¡Pena!? Te vi hasta el núcleo de tu lindo y bello corazón, amor.—lo suponía. Rei.
—Tienes razón, pero igualmente me da vergüenza y pena.—rio.—¿A dónde me llevarás hoy, cariño?
—A un restaurante, hoy cumplimos dos años de que nos enamoramos, ¿Recuerdas?—sus ojos brillaron tanto que me causo cierto cosquilleo en la barriga.
—Claro que si, Tommy, solo que no recordaba el lugar a donde íbamos a ir.—sonrei.
—¿No te lo habia dicho? Yo recordaba que si.—Rio.
—No, no me dijiste.—sonrei.
—Entonces, sorpresa, ya llegamos.—al llegar vi mi restaurante favorito, era un restaurante de comida china.
Los dos entramos de la mano y varias personas nos vieron, pues creo que, por lo que dijo Axl, era algo conocida, y Tommy obviamente también, hasta más que yo. Nos sentamos en una mesa reservada, todo era tan lindo. Luego de ir a comer fuimos a su casa, donde estaba Nikki, Mick y la rubia oxigenada, Vince. Allí estaba Skylar y su madre, está rápidamente vino hacia mi con una sonrisa pidiendo que la cargue.
—Hola bebé.—Sonrio.
—Hola tia Michelle.—dijo tiernamente.
Fui y saludé a aquellos chicos y la rubia.
—¿Dónde fueron hoy?—Pregunto el bajista.
—A comer. Y obviamente a mi restaurante de comida china favorito.
—Claro, como siempre T-bone complaciendo a su “Chelle”—hizo comillas con los dedos. Reímos.
—Claro, también deberías.—dijo la rubia y rodó los ojos divertida.
—¿Que? Siempre te complazco en todo, preciosa.—dijo en tono seductor y los dos empezaron a besarse.
—Bueno bueno.—aclare la voz.—Hay niños presentes.
Estos se rieron como un grupo de hienas locas, rodé los ojos.
