15.

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—¡Oliver! —aquella voz aguda y femenina sonó desde la entrada principal. —me dejaste desayunando sola... Oh.

—señorita eliza, un gusto verla. —Oliver esbozo una sonrisa maliciosa de escuchar tal mentira.

—Lo mismo digo... Tu rostro me es extrañamente familiar.

Para el alfa esto fue aún peor, eliza no venía desde que enterraron a sus padres, cuando Oliver le indicó que no se hiciera ilusiones con él.

Eliza puede creer que Oliver es ingenuo, no sabe que el alfa ya esta al tanto de todo lo que ha maquinado desde que Keith puso un pie en su mansión.
El alfa le habló directamente al mayordomo sin tomar en cuenta las quejas de la mujer.

—qué sirvan el desayuno para el tutor.

A Keith particularmente le molesta que le diga tutor, el puede llamarle por su nombre o su apellido, pero al llamarlo tutor lo hace sentir como solo eso.

—no es necesario, desayune temprano.

—no seas terco, siéntate en la mesa y....

—¿lo estipula mi contrato?

Oliver dejo de sobar su sien y lo miró, con esa actitud altanera Keith también se ve bonito.

—¿debería escribir otro contrato?

—me retiro, debo preparar mis clases y quiero ver a los mellizos.

-siempre son solo los mellizos. - mascullo Oliver, eliza lo oyó y se vio molesta pero ya era demasiado tarde, Keith estaba a medio camino en la escalera.

Oliver regreso a la mesa y en vez de beber el té que le habían servido, el cual ya estaba frío. Pidió una taza de café. Aromaticony oscuro como su estado de ánimo.

Lucas sullivan tocaba a keith con una libertad que traspasaba sus límites, nadie debería tocar así a otros en público, es indecente, es absolutamente morboso e indebido.

"yo ni siquiera puedo tocar su ropa"

—¿en que hotel te alojaras?

—¿hotel? No reserve en ningún hotel, vine para acompañarte a la fiesta del día viernes.

—no te pedí que hicieras nada así. —dijo tajante y la vio —debes dejar de venir, se ve mal que una mujer soltera se quede largos periodos de tiempo en la casa de un hombre soltero.

—eres demasiado tradicional, incluso sin estar comprometidos podemos seguir viéndonos. Además que tiene de malo, solo usaré el cuarto que acomodo el tío para mi.

—no hay tla lugar, escucha eliza, estas visitas deben terminar, puedes pasar la noche aquí pero mañana debes irte.

—¿por qué? ¿Qué tiene de malo? Yo quiero quedarme, no tiene nada de malo... —insistió una y otra vez. —no hay nada de malo en quedarme contigo, sé que te puedo llegar a gustar si pasamos tiempo juntos.

—nunca pasó y no pasará. —dijo con firmeza y su voz notoriamente molesta.

—¿hay alguien?

—si. —eliza había preguntado antes esto, la respuesta era la misma pero ahora la sintió amenazante.

—¿Es ese chico? La zorra qué iba y venía con toda clase de hombres para conseguir apoyo...

Oliver la vio molesto, no cabía duda de que eliza seguía siendo la misma niña que tenía cero consciencia del mundo y aunque no viene de una familia demasiado prominente, es arribista y mal hablada.

—controla tu boca cuando hables de los demás.

—sabes que nadie en tu familia se ha unido a un hombre, piensa que opinarian tus padres... Aunque sea un omega no puede ser mas que un...

El omega del duque Donde viven las historias. Descúbrelo ahora