32.

32 6 4
                                    

🔞Contenido explícito, lenguaje vulgar. Por los siguientes dos capítulos. Lean bajo su propia responsabilidad .










Desde que subieron al ascensor, Keith sintió el ambiente pesado, las extrañas energías que el alfa le enviaba lo estaban poniendo nervioso y aunque no quería, se encontraba excitado. Imposible no hacerlo, con todas esas feromonas que lo estaban envolviendo dentro del pequeño espacio. Cuando el timbre del ascensor sonó, baja con movimientos lentos mientras el alfa lo sigue casi respirandole en la nuca.

Llegaron a la puerta del cuarto, Oliver le abrió la puerta y solo poner el pie sobre la alfombra del cuarto, el alfa tomo su brazo y lo giró, lo tomo por debajo de los glúteos y lo llevo al baño en brazos. No se contuvo a la hora de quitarle la ropa casi desesperado para luego de tenerlo desnudo, quitarse la ropa, lo puso dentro de la tina, echo a correr el agua que fue calentando se rápidamente.

—¿estoy sucio?—preguntó avergonzado sintiendo que las manos del mayor eran muchas.

—Lo estas, hueles a ese alfa. —se estiró y tomo el jabón que el usaba, siempre ponían el mismo en sus cuartos cuando viajaba así, que el tutor, oleria a él. —¿dormiste también con él?

Pregunto deteniendo su mano llena de espuma sobre el pecho de Keith.

El tutor se encendió en rojo y no se atrevió a levantar la cabeza. La noche anterior Oliver escucho una respuesta a una pregunta similar pero conoce a Keith, sabe que siempre es consciente incluso si esta dormido así que necesitaba confirmarlo de nuevo.

Ariel se comportaba cercano y consciensudo con él así que ahora temía qué la respuesta cambiara.

Se agachó y olfateo su cuello, con las manos estrujo su trasero con mucha fuerza.

—¡y tu! Las chicas dijeron que siempre elizs iba a la casa, incluso ese tonto qué quiso drogarte. —contestó empuñando su mano contra los pectorales del alfa.

Tendría que hacer algo para que las empleadas no le dijeran nada fácil de tergiversar a Keith. El deja volar su imaginación rápido, pues, nunca durmió con nadie, incluso si Louis una vez fue a la mansion, solo se quedo hasta que termino la fiesta de compromiso de su hermana hace más de cuatro años.

—tú y otros alfas creen que ellos pueden tener a los omegas o betas solo para ellos pero se acuestan fácilmente con todo el que quiere, incluso tu familia te envía omegas...

—yo no soy así... Anoche te lo dije —Keith lo sabía, solo estaba defendiendo se de la vergüenza —hoy también te lo dije, eres la primera persona con la que he dormido, con la que he tenido sexo, de la que me enamoro...

Respiro como un toro el menor mientras desvío su rostro.

—no te creo nada. Yo no he estado con nadie, Ariel fue mi novio pero no quiso esperar a que me sintiera más cómodo con él. Y me engaño. —hizo un bonito puchero qué casi hace salir el corazón del alfa de su pecho.

—¿te hago sentir cómodo? Viniste a mi por tu cuenta y continuas aquí.

—no vine para eso ni anoche y tampoco hoy.

—entonces solo limpiemonos y vamos a la cama—dijo eso pero continuaba apretando el trasero del tutor. Keith levantó la mirada angustiado como si eso lo molestara. Pensó un segundo mientras miraba el cuello del alfa y teniendo tanta vergüenza de querer pedirlo. —solo no quiero que huelas como las feromonas de alguien más, a menos cuando estas a mi lado.

Sus pequeñas manos delgadas y pálidas se apretaron y sin mirarlo le dijo con mucha suavidad.

—no me molesta hacer un poco... No es que no... —su rostro se puso rojo, no quería decir en voz alta qué estaba esperándolo desde que se sentaron en el restaurante. —podemos hacer un poquito...

Oliver sonrió, bajo su cabeza y lo beso con mucha suavidad, solo un beso superficial mientras sonreía.

Sigue siendo un omega después de todo, sigue teniendo esas actitudes frágiles y dulces, avergonzandose si razón pero reaccionando a las situaciones más sensibles de ambos cuerpos encontrándose.

El tampoco puede resistirlo y si realmente, Keith, no quería hacer nada, tendría que quedarse en el baño para bajar su excitación.

—pone tus manos contra la pared.

Keith no quiso mirarlo pero se giró y obedeció. El alfa tomo la esponja y con cuidado limpio su espalda y vientre, suavemente, bajo y comenzó a limpiar sus piernas, el agua caliente recorría ambos cuerpos, beso desde la espalda baja con mucho cuidado. Keith mordió sus nudillos cuando sintió como besaba sus glúteos, recordó que anoche durante mucho tiempo sintió al alfa entretenido con su cuerpo.

Cuando separó su trasero para besar la entrada, hundió su rostro contra sus manos y soltó un jadeo largo y sonoro. Avergonzado cubrió su boca con el brazo y empujó con la mano contraria la cabeza del alfa pero este no retrocedió, al contrario, con algo de fuerza lo inmovilizo por la cadera.

Su lengua jugo ahí durante lo que pareció una eternidad, cuando Keith miro hacia el piso vio que no solo era agua lo que escurría en la pared o sus piernas. También podía ver a Oliver  masturbandose con las rodillas flexionadas mientras sujetaba su cadera con una mano. Entraba y salía de su interior, sentía como si un placer que borraba su capacidad de pensar lo agobiara, le gustaba la sensación pero lo desesperaba estar tan ansioso y emocionado.

El alfa soltaba unos sonidos roncos mientras lo saborea a como si fuera lo más exquisito de su vida y el aparte de la vergüenza solo podía disfrutarlo.

Sabía de ciertos comportamientos de alfa, este era uno común de los extremos pero no pensó tener que vivirlos de esa manera. Era la primera vez según Oliver pero parecía un verdadero experto aunque no tuviera con que compararlo.

—¿por qué haces eso? —preguntó jadeando y cansado cuando el alfa se levantó y rodeo su cintura.

Afirmando el mentón en su hombro mientras se frotaba entre sus piernas, escucho ese gruñido posesivo.

—porque es mio. Todo lo que pueda obtener de ti lo disfrutaré al máximo.

No lo hicieron en el baño, lo saco con cuidado y lo envolvió en una enorme toalla mientras camino desnudo con el hasta la cama. Lo seco con cuidado, el alfa continuaba recto y desnudo pero se concentró en cuidarlo.

—creo que anoche fue demasiado, no necesitamos ir tan rápido, hacerlo una vez esta bien pero necesito calmarme porque es tu primera vez...

—no soy tan frágil...

—pero si lo hago como quiero puedo hacerte daño.





El omega del duque Donde viven las historias. Descúbrelo ahora