El omega del duque

36.

El auto de Oliver avanzó ahora con el paso libre, el camino de la entrada a la mansion es largo, tanto como para tardar 5 minutos desde la entrada. Su guardia lo siguió y pronto, el resto de la guardia de la reina, también. Ellos tenían sus propios autos y escoltaron a todos dentro del terreno.

Había que atravesar un bosque para llegar a la mansion y dentro del automóvil, Oliver por fin pudo relajarse y atender a Keith.

—tus manos...

—no me hizo nada, solo la aruñe.

—si vi— tomo sus manos y limpio los dedos uno a uno con un pañuelo. —no debiste hacerlo, ese anciano loco pudo golpearte.

—ella quería tocarte con sus manos...

Lo dijo con tanta naturalidad qué incluso el alfa se sintió avergonzado. Haciendo un análisis de los últimos días, estaba seguro de que esto fue en la dirección que quería pero demasiado rápido. Incluso tuvo relaciones por primera vez y ahora tiene un omega bastante amenazante qué no deja que otros lo toquen.

Se puede decir que fue un salto demasiado grande incluso para él que ahora sabe que no puede apartarse de Keith.

Llegaron a la entrada, mientras Keith bajaba, sintió un miedo recorrer su cuerpo cuando algo frío se deslizaba por su espalda.

Los pasos fuertes y pesados que avanzaron por la loza de la entrada, los brazos qué lo apretaron y esa cabeza frotandose contra él.

—¡pequeño miooooooo! Sigues tan lindo como siempre, pero apestas.

—¿apesto? —preguntó Keith.

—hueles como alfa en celo... —sentencio yena y esbozo una sonrisa dirigida al duque —tu rico aroma a bebé desapareció por completo...

—¿aroma a bebé?

—siempre hueles a vainilla.

A Keith le quedo rondando esto porque Oliver siempre le dice; hueles a vainilla.

Las personas no son capaces de olfatear su propia feromona, mucho menos cuando están excitados.

—vamos dentro, te haré una cena muy rica... —Keith cubrió su mejilla avergonzado, la parte que siempre le había desagrada do de alfa y omega es que los demás alfas y omegas, saben cuando tienen relaciones.

Es algo de los alfas marcar con su aroma y algo de los omegas envolver de feromona a su alfas. El no puede entenderse como omega aún, ha pasado demasiados años sin una feromona aunque a veces la glándula le causaba escosor.

La mujer lo soltó y como la persona excentrica qué es, dio un par de vueltas y entró a la mansion.

Oliver parecía tan feliz como yena y el simplemente los siguió.

Por tercera vez el impacto llegó directo a Keith, los mellizos estaban hechos un desastre, con sus pijamas puestos y sus rostros de angustias.

Uno de ellos fue directo a los brazos de Keith y el otro se abrazo a su pierna, porque su cuerpo no aguantaría el peso de una alfa como iris, pero kirian qué es omega, es ligero y pequeño. Los brazos de Oliver tomaron a iris y ella se abrazo a su cuello.

—dijiste dos días pero fueron cuatro. ¿Por qué tardaste tanto?

—tuve que quedarme a cuidar a Keith, tenía dolor de barriga y espalda.

—¡Keith! —grito iris. —tienes que comer más y dejar de enfermar tan a menudo.

—tú hermano se hizo cargo, le di una medicina. —yena no aguanto la risa y Keith solo camino de prisa hasta la sala. Sun los esperaba completamente angustiado también, es que habían dos opciones, Oliver regresaba sin un tutor y su vida se volvía tan pesada como hace meses, donde era padre, madre, asistente, tutor y soportaba el mal humor de su jefe, es que el alfa era amable pero parecía una especie de asesino en ganster para solucionar los problemas del ducado.

Pero al parecer era la segunda opción, es más, los rastros de supresor es que su amo tomaba continuamente habían desaparecido y su semblante era mejor, aunque claramente el tutor parecía un poco más cansado, supuestamente se quedaban una noche más para así descansar.

Las niñeras y sirvientas sirvieron el té, Keith les pidió algunas cosas y les señaló otras mientras servían.

Sun se paro al lado del tutor y le entrego un té especial, tenía un toque de leche y canela. Keith lo miró hacia arriba sin comprender.

—sirve para recuperar energía y fortalecer el cuerpo...

Keith se sonrojo demasiado, Oliver sonrió ladino mientras lo miraba.

—ire a preparar la comida.

Oliver quedo solo con yena una vez dijo esto, los mellizos persiguieron a Keith y las sirvientas también.

—¿tienes alguna pregunta?

Oliver desvío la mirada, bebió su té y apretó los labios.

—dijo que sentía el aroma de Keith, realmente no hay muchas personas que lo digan y esta convencido de que es beta, claro que ahora acepto recibir tratamiento, si su cuerpo...

—no es su cuerpo—yena indicó su sien con el dedo índice. —es su mente. ¿Por qué crees que yo siento su feromona pero mi esposo no?

Oliver negó bajando la cabeza.

—porque no me teme. Cuando supo que yo di a luz a otis, ese miedo se disolvió, es como un instinto, mientras sea alfa, el temera, parte del trauma.

El alfa levantó el rostro.

—yo siempre pude sentir sus feromonas. —la mujer paso su mano por el respaldo del sofá y lado la cabeza para mirarlo.

—quizás el te reconoce como su pareja, aunque sea de manera inconsciente, aunque sea un hdp, un omega que reconoce a su pareja siempre piensa lo mejor de él.

—yo no soy... —ella sacudió la mano frente a Oliver.

—mi hijo me contó un poco, dijo que cuando llegaste a casa la primera vez hasta su piel fue un poco más brillante, aunque solo quiso pelear contigo.

—¿otis?

—Keith, él estaba muy enojado.

—sigue con muchas restricciones... Me guarda muchas cosas.

—pero ustedes pasaron la noche juntos, que más puedes guardar si estas al desnudo y sientes su aroma. Yo estuve con omegas antes de casarme, bueno mi experiencia es corta, pero se que no siento su aroma porque ahora solo quiere traerte a ti.

—el primer día, ariel sintió su feromona.

—Es probable que su ropa aun tuviera feromona, pero no significa que quisiera atraerlo. ¿Te encontraste con ariel?

—estaba en la ciudad—respondió el duque—lo toca con mucha confianza.

—claro, ariel es buen chico, no dudes en llamarlo si alguna vez necesitas ayuda, el haría todo por Keith.

—porque esta enamorado de él.

—Ariel renegó de su pareja destinada por Keith pero terminó engañandolo, Keith le dijo en su rostro que es el karma, que el no estará a su lado y que su pareja destinada lo hará sufrir. Ariel siente que esta en deuda pero no porque siga enamorado, sino porque fue el único nexo que lo mantiene unido a Nathan.