Vol. Ex Life-11: Draconis Deux parte XII.

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La imagen cambió mostrando a Issei junto al resto del ORC, donde las chicas y Gasper estaban vistiendo kimonos coloridos por su parte Issei, Kiba y Xenovia se encontraban con sus ropas de siempre. Se podía ver como estaban justo en la entrada de un templo y que habían muchas personas reunidas.

Justo delante de ellos estaba Kunou quien estaba feliz de tener a Issei de visita. A los segundos su madre apareció para darles la bienvenida al grupo donde tenía una sonrisa feliz por verlos aunque le dirigió una sonrisa coqueta al Sekiryuutei.

-Se ve que las cosas están muy movidas. – Jaune mencionó al ver la cantidad de personas en el templo.

-Tch... Incluso ahí se ven las intenciones de la enana.

-Vamos Blake, ahí Kunou-chan solo es una niña. – Trataba de calmar a la Faunus gato quien soltó un bufido. – Solo está feliz de ver a los que salvaron a su madre.

Esas palabras se ganaron que todos lo vieran con los ojos entrecerrados. El Sekiryuutei solo ladeo la cabeza sin saber porque lo veían de esa forma.

-Nunca cambias Issei... – Ren suspiró al ver la densidad de su amigo.

-Eso solo me hace temer por su futuro niñas.

Cinco de las hermanas Arc ahogaron un grito de exasperación por las palabras de su madre junto que veían con cierto rencor al castaño.

-Mi querido Issei... Solo no digas más. – Trago saliva al ver el brillo siniestro en los ojos de Ruby.

Kunou le preguntó si Ophis no estaba con ellos a lo que él respondió que se quedó en casa por un resfriado, pero que le hubiera gustado verla. Issei vio como eso parecía desanimar un poco a Kunou, pero aún tienen que mantener la identidad real de Ophis en secreto.

La pequeña youkai salió corriendo diciendo algo de que le prepararía una poción especial a Kyoto a Ophis. Issei y el resto vieron con una sonrisa al ver que realmente se preocupa por Ophis. En eso Yashaka dijo que él realmente se lleva bien con Kunou, cosa que no negó pero se tenso cuando la mujer se acercó más a su rostro y le habló al oído.

-Sekiryuutei-Dono, ¿No será posible que puedas esperar hasta que Kunou sea mayor? – Tragó saliva al ver la expresión sensual en su rostro. – Pero si no puedes esperar con gusto puedo ser tu pareja, Kunou siempre quiso un hermanito... Sin mencionar que aun no te agradezco por haberme salvado y haber cuidado de mi preciada hija.

-¡Es una descarada! – Weiss grito al escuchar las palabras de la mujer. – ¿¡Cómo puede pedir algo así, más si están en un supuesto lugar sagrado!?

-Simplemente ese Issei-nya parece haber llamado su atención. – Kuroka le respondió a la heredera mientras sus ojos se hacían más felinos. – Saber que él la salvó y que se lleve bien con su hija solo hace que gane puntos con ella nya.

-El clásico caso de ganarse a la madre por medio de la hija... Solo que en esta ocasión es de forma involuntaria. – Bikou se rasco la cabeza al ver la suerte del Sekiryuutei. No era un secreto que la Kyuubi era hermosa... Como envidia a ese tipo.

-......Ese otro yo solo quería ayudar a esa Kunou-chan... – Bajó la cabeza al sentir la mirada de sus novias. – ......Mejor me callo.

-Aunque... – Nora se rascó la barbilla en muestra de que está pensando en algo. – ¿No es un escenario común en los libros de Blake que tanto madre e hija estén interesadas en el mismo sujeto?

Esas palabras hicieron que todas las miradas estén sobre Blake quien se sonrojo por la pena de que volvieran a mencionar sus libros. En eso fijó su mirada hacia la pelinaranja del Team HVNL quien solo le sonreía de forma casual.

Diabolos Dragon of RemnantDonde viven las historias. Descúbrelo ahora