Vol. 5 Life-11: Descanso previo al asedio.

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En la entrada de la cabaña se podían ver a Raven y a Issei, quien había bajado de dónde estaba viendo las estrellas. El chico se encontraba de brazos cruzados mientras veía expectante a la mujer delante suyo.

Hace un momento la había visto con una foto en la mano en donde salían ella y un bebe. No había que ser un genio para saber que la infante de la foto seguramente era Yang, pero eso le generaba una duda. ¿Por qué ella tenía algo como eso sí, en teoría, abandonó a su familia? Necesitaba respuestas.

-¿Y bien? Estoy esperando Raven.

La mujer solo soltó un suspiro ante la mirada seria del adolecente frente de ella. Sabía que en esta ocasión no tiene forma de huir y aun si intentara usar sus portales sabe que él no dejaría el tema... Es más, lo cree capaz de decirle a Yang sobre la foto.

-Es... Un recuerdo. Uno de una buena época...

-Eso no responde a mi pregunta.

-Mira es solo... Ugh, es una larga historia.

-Tenemos tiempo, no es como si mañana fuéramos a Haven de una vez. – Se encogió de hombros, no dispuesto a dar su brazo a torcer. – Así que vamos Raven. Soy todo oídos.

-......Supongo que no hay de otra. – Suspiro tras decir eso. – Supongo que sabrás cómo se obtiene el poder de una Maiden. ¿No?

-Si no mal recuerdo, Ozpin dijo que se consigue de tres formas. La primera es que la actual anfitriona muera y el poder pasa a la última mujer en la que pensó, la cual debe tener menos de 25. La segunda es que otra mujer menor de 25 mate a la actual anfitriona y el poder pasa a esta. Por último y lo más común...

-Que el poder pase a una mujer menor de 25 de forma aleatoria... Ese es mi caso.

Issei vio a la pelinegra con algo de sorpresa. Eso no lo espero.

-Un día de la nada, justo cuando estaba apunto de tomar a Yang de su cuna para darle de comer, sentí como alguien me hablaba y de la nada termine lanzando un rayo que quemó la cortina... Te imaginarás mi reacción.

-Un susto de muerte supongo...

-Eso es quedarse corto... El rayo por suerte le dio a la cortina, pero si hubiera ido un poco más abajo... – La mujer cerró los ojos con fuerza y sacudió la cabeza en un intento de alejar la idea.

-Creo empezar a entender... – El Sekiryuutei se llevó una mano a la cabeza al imaginar por un momento... – Pero eso no explica el porqué te fuiste.

-Claro que lo explica. – Issei la vio con duda. – Traté de tenerlo ocultó por un tiempo, pero incluso cuando estaba en calma podía sentir la magia manifestarse aunque fuera solo un poco. ¿Te imaginas lo que es no poder tocar a las personas que aprecias sin usar guantes por miedo a hacerles algo involuntariamente?

La verdad no podía imaginarlo. La sola idea de que pueda lastimar sin querer a sus amigos o a las chicas... No lo soportaría.

-Además que por lo de Salem, el riesgo era doble. Es por eso que decidí marcharme.

-Pero... ¿Por qué no decirle a tu equipo o a Ozpin? – Preguntó mientras suavizaba un poco la mirada. Por su parte Raven solo soltó un pequeño bufido.

-Si se lo hubiera dicho a Ozpin no dudo que igual me hubiera alejado para "mantenerme a salvo", siendo lo único que le importaría el poder de la Maiden.

-Ya... Ozpin era bastante idiota antes. – Issei recordó el trato que tenía con el mago al inicio y... Si, puede entender por qué no dijo nada.

-En cuánto a mi familia... No podía arriesgarme. – El la vio con una ceja alzada para que se explique mejor. – Tanto Tai como Qrow estaban muy metidos con Ozpin en ese tiempo. Summer también, pero ella al menos pensaba más las cosas. Pero a lo que voy es que hubieran estado de parte de Ozpin, lo que tarde o temprano pondría a Yang en peligro.

Diabolos Dragon of RemnantDonde viven las historias. Descúbrelo ahora