"We 3"

32

La cena fue un tanto tensa. William no quería ello, pero no podía dejar de pensar en que le ocultaba John, estuvo todo el día pensando en eso, tanto que Jim lo regañó por no hacer bien su trabajo, eso era lo peor, ser regañado por su mejor amigo que no se toma en serio nada, pero sabía que eso venía de su preocupación.

-Iré a hacer mi trabajo.-Exclamó Dave mirando entre ambos, se sentía extraño este ambiente entre ellos, se había acostumbrado a verlos demostrando su amor y ya, pero sabía que no siempre podrás estar bien con tu pareja.-Es importante así que...Umm, ¿John?

-¿Qué sucede?

-Mañana no creo ir a clases.-Y antes que John lo regañé por faltar a clases habló.-Iré a mi casa, quiero hablar con mi familia.

Eso consiguió que William levanté su vista de la comida en su plato, comida a la cual no le ha dado ni un bocado. Era obvio que lo que dijo era sorprendente para ambos.

-No voy a volver aun, creo. Solo quiero hablar con ellos, quiero oírlos, necesito eso. Han pasado días y yo quiero saber si mi relación tiene arreglo o debo aceptar de una vez que no es así.

-¿Estás seguro de ir solo?

-Si, William. Es algo que tengo que hacer por mí mismo.

-Bien. Si alguno de ellos dice algo malo, dime.

-¿Para que vayas a pelear con ellos una vez más?

-Iré las necesarias.

Dave sonrió un poco al oír eso. Se seguía sintiendo extraño tener alguien que se preocupa por ti, pero con cada día que pasa siente que puede recibir más el aprecio de William y John, incluso podría dejar entrar a otros.-Bien, entonces saco esto.-Apuntó a su plato y vaso.-y me iré.

-Déjalos.-Le quito importancia John.-Ve a hacer tu trabajo, yo me hago cargo de eso.

-Bueno.

Era evidente que John quería quedarse a solas con William, así que Dave les dio ese espacio.

-No era necesario echar al chico, John. Podría haber esperado para la conversación.

-No, no puedes. No has comido nada, solo haces eso cuando tu mente está en otro lado y sé que te carcome la mente lo que no sabes, siempre has odiado estar en ignorancia.

Eso era cierto.

William se colocó de pie y se encaminó hacia el salón sabiendo que John lo seguía, prefería tener la conversación aquí que en la mesa con la cena a su alrededor.

-Dime.

-Vinieron Zara y Cassie. Mi hermana está preocupada por mi seguridad, siente dudas sobre nosotros, más ahora que está el asunto de la rivalidad de Dave e Ian y no es como que mi palabra sea la mayor prueba de que estamos bien. Ya le mentí antes sobre una relación ¿Por qué no lo haría de nuevo?

Bien, los sucesos de ese tiempo siempre los iban a perseguir.

-¿No confía en ti?

-Un poco difícil hacerlo cuando hice que su mejor amiga le oculte el hecho de que mi novio me golpeaba. Sé que ella quiere creer que eso no sucederá de nuevo, pero siempre habrá esa pequeña duda que no te deja seguir.

Y William lo entendía. Probablemente si no estuviera junto a John y este saliera con alguien, lo más seguro es que haría cualquier cosa para asegurarse que estuviera en una relación sana. No lo creería hasta que lo viera él, no creería nada de lo que dice John, así que no puede juzgar a Zara porque sabe que ella que al igual que él mismo sigue viviendo con la culpa de no poder ver a través de la mentira y hacer algo para proteger a John. Es algo que siempre van a compartir.

-¿Te pidió que me dejes?

-No. No del todo. Ella está bien con la relación, solo que un matrimonio es algo más serio y tiene razón en que lo es, pero maldición ¿Por qué viene y me dice todo ello ahora? ¿Por qué no dijo algo antes?

-¿La hubieras oído?

William lo miró esperando una respuesta que ya sabía porque la respuesta de John sería la misma suya.

-No.

-Entonces, ¿Por qué importa cuando habló si no ibas a oírla, John?

-No lo sé.-John desordenó su cabello al pasar su mano con rapidez por el. Podía ver la frustración en sus movimientos y palabras.-Tengo miedo.

-¿De qué?

-Todos actuaron felices cuando nos juntamos, la mayoría estaba harto de las vueltas que dimos, pero ¿Qué pasa si ahora ya no están así? ¿Qué pasa si ahora por fin están pensando como querían y antes solo actuaron así por el cansancio? ¿Y si... ¿Y si es lo mismo con nuestra familia?

-John...

-¿Qué pasa si mis padres piensan igual que Zara? Jamás he ido en contra de mis padres, William, maldita sea, he intentado forzarse a algo que ya no quería para verlo felices y no quiero perderlos.

-Entonces, si te piden que me dejes, hazlo.

John lo miró de inmediato y no se extrañó al ver el dolor en sus ojos.-¿Así y ya? ¿Solo te dejo? ¿Harías eso conmigo? ¿Si tus padres te lo piden, me dejarías?

-Jamás he sido el hijo que quieren, me aman, por supuesto, pero al final de cuentas nunca he seguido sus instrucciones y lo sabes. La verdad es que no. Si alguien se atreve a sugerir que te deje no le va a gustar mi respuesta.

-Es lo mismo aquí.-Sí, William sabía eso.-Así que no entiendo porque me dirías ello como si fuera fácil para mí dejarte y seguir con mi vida. No pude hacerlo ni cuando éramos amigos ¿Cómo podría ahora?

- Tú amas a tu familia y si te tuviera que dejar para que no les pierdas, lo haría sin dudar ni un segundo porque te amo y la prioridad para mí es tu felicidad. Me mataría no tenerte, pero el punto es que lo que haría por ti llega a rozar lo estúpido.

Una pequeña risa salió de John lo cual sorprendió a William, había esperado otra reacción, no esa para nada.-Eres estúpido si crees que no es lo mismo para mí. Si mi familia se niega a que me case contigo, iría y me casaría contigo en los siguientes minutos. Maldita sea, William, iría y me casaría contigo ahora mismo.

-¿Estás loco o algo así?

John se acercó a él, su mano derecha subió para acariciar su mejilla y William solo pudo observar los labios de su novio que pronto formaban una sonrisa.-Tal vez. Tal vez lo estoy si te elijo a pesar de todo y de todos.

-John, yo...

-Lo sé. Eres tan loco como yo y harías lo mismo.

-Sabía que hacia lo correcto al hacerme tu amigo.

-Tu padre te obligó.

-Y pude haberme negado.

-Pudiste.

-Me alegro de no hacerlo.

-Sí.-John le dio un pequeño beso haciéndolo sonreír brevemente.-Yo también.