Casi nunca hablo de mis sentimientos, pero recordarte me da esa necesidad de hablar de ti con todos mis amigos y preguntar "¿Creen que me tomaría en serio?" Aunque se que su respuesta será negativa y que eso heriría mis sentimientos.
Me gusta crearme historias falsas en las que tú me amas como yo a ti y que eres romántico, distinto. Pero cuando vuelvo a la realidad me doy cuenta de que me gustas así, frío, distante de vez en cuando. Porque yo ya soy un desastre de energía y alguien tiene que ser el tranquilo en la relación.
Pocas veces dicen que estoy loca, o que soy rara. Lo dicen porque me ven cerrar los ojos sin razón aparente, solo por unos segundos, antes de continuar con lo que sea que haga. Lo que no saben es que lo hago solo cuando tú recuerdo llega a mi cabeza, cada vez que la imagen de tus ojos o tu sonrisa aparecen en mi mente.
Cierro los ojos con tanta fuerza que parece que quisiera sellarlos para siempre. No se equivocarían si creyeran eso. Y tener el recuerdo de tu ojos mirándome, tus labios besándome o tus manos tocandome, es tan doloroso que a veces me debilita.
Algunas veces cierro los ojos con tanta fuerza que me miran raro, como si estuviera desquiciada. Lo estoy, porque cada vez que recuerdo tu voz, mi rostro sonríe automáticamente, como sonríe cuando recuerdo tus manos en mi rostro o la manera en que me abrazas.
Siento que puedo olvidarte, pero mi mente no quiere, se niega, por eso arrugo cada parte de mi rostro al cerrar los ojos cuando te recuerdo. Tengo las esperanza de que así mi mente te olvidará al menos unas horas más y podré vivir mi día a día con calma.
Casi siempre que repito las veces que te he visto y las veces que te he besado, mi cuerpo tiembla, no se nota, y mi corazón se acelera, mi pecho simplemente se siente intranquilo y el estómago se me revuelve.
Supongo que aún después de tanto tiempo y tantas cosas, siempre causarás el mismo efecto en mi y en todo lo que respecta a ti, mi cuerpo es débil.
Siempre he sido tuya, de una u otra forma, siempre lo he sido. Es algo que me atormenta por las noche cuando pienso en ti porque no creo que deba ser así. Yo no debería ser tuya, yo debería poder existir en paralelo a ti, ser capaz de pasar un día entero sin pensar en ti o preguntarme "¿Soy yo la única que piensa en él, o me recuerda más de una vez al día?"
Me gustaría que fuera así, que pienses en mí aunque no me lo digas, le da más valor. Al final las cosas que haces o sientes por otra persona siempre valen más cuando las haces sin querer, como aquella vez en que te conté todo lo que me recuerda a ti, una parte de mi cree que eso te dió ternura.
Jamás voy a ser capaz de tenerte a dos centímetros de mi rostro y decirte lo mucho que desearía que fueras el príncipe azul que me salva, o el villano que dejaría arder el mundo si de eso dependiera estar juntos. En mi imaginación yo soy tan valiosa para ti como tu lo eres para mí. Pero es solo eso, imaginación.
Me encantaría ser valiente y decir lo mucho que te extraño, lamentablemente cuando lo hago suelo asustar a las personas y, sin decir nada, en unos días se olvidan de mí y me obligan a dejar de quererles.
Y nunca pasará, yo lo sé, se que nunca serás quien llegue con flores y me prometa una vida llena de amor, aunque no todo sea perfecto. Y no quiero que me prometas nada o que cambies, te quiero como eres, pero tal vez, me gustaría que sin prometerlo, me amaras como sabes, como puedas, como quieras hacerlo, mientras tu prioridad, igual que la mía, se vernos felices.
Al final lo único que quiero de ti son besos en las mañanas, abrazos todo el tiempo y noches juntos en las que me abrazas sin más, solo porque te gusta. Yo solo quiero que me quieras.
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Cartas Que Nunca Entregué.
Short StorySiempre que siento demasiado o amo a alguien con demasiada fuerza, cuando algo duele de más, o me hace feliz para variar, siempre le escribo una carta.