Capítulo 50

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Charles

-¿Pensez-vous qu'il est temps de leur dire ? ¿Crees que es tiempo de decirles?. - Me dijo Checo y lo volteo a ver.

-Peut-être. Oui. Tal vez. Si. - Le dije y el pareció satisfecho con mi respuesta.

Nos quedamos en silencio otro rato más, ordenando nuestras ideas y al fin, poder contarles.

¿Es hora?, ¿ya es tiempo?, ¿que pensaran?, ¿seguirán con nosotros?, ¿nos dirán fenómenos?, ¿lo que tenemos se olvidara?, ¿seguirán...con nosotros?.

Cuándo Checo hiba a empezar a hablar se escucho un grito algo agudo. Sabíamos de quien era, era George. Y en muy poco tiempo, se hizo presente detrás de la puerta del jardín.

-¡Tengo una noticia!, ¡tienen que venir rápido!. - Nos dijo muy emocionado George.

-Hay que irnos. - Dijo Max y se levantó, Carlos lo siguió y nos ayudaron a levantarnos.

-Apparemment, ce n’était pas le moment Al parecer no era tiempo. - Me dijo Checo y solo le di una pequeña sonrisa.

Caminamos hasta donde estaban todos en el frente de la puerta de mi casa cerca de una fuente. George tenía un ramo de orquídeas delicadas.

-¿Cúal es la noticia?. - Preguntó Lance quien estaba abrazando a Fernando.

-Son novios. - Dijo Checo antes de que George contestara.

Como dijo, es bruja.

-¡Checo!, ¡era que yo lo dijera!. - Le reprochó George con un puchero y Lewis soltó una risa.

-Era más que obvio, pero te dejo. - Le dijo Checo juguetón y solo se recargo en Max.

-Bien, les quería decir que Lewis y yo... ¡Somos pareja!. - Dijo con clara emoción y soltó un pequeño gritito. Lewis solo hizo más grande su sonrisa al verlo. Entrelazaron las manos y todos nos acercamos.

Ay no puede ser... Alguien más está saliendo, George. Oh mi Georgie.

Felicitaciones recibieron y como Lance y Fernando, me dejaron al final, esperando que los aceptará pero solo unos minutos más. Me acerque a George y agarre sus manos.

-Le gusta despertar abrazado junto con su desayuno favorito qué don los waffles y un té, le gusta tomarse muchas fotos, le gusta siempre salir con ropa de nuestros diseñadores, le gusta lo caro, le gusta viajar demasiado. Sabe todo de todos, siempre te platicara de las personas, le gusta que lo escuchen, le gusta que se interesen en el y le pregunten cosas de él. Cuando veas que se queda mucho tiempo viendo en el espejo quitalo de ahí, se pregunta mucho sobre su peso y su físico, recuerdale qué es hermoso y su físico es precioso, hay veces en las que cubre los espejos, ayudalo con eso y evita cualquiera de ellos, si hay un espejo siempre estate cerca de el. Sus ataques de ansiedad son solo antes de las entrevistas, le gusta dormir en una cama grande, le gusta despertar con la luz de sol; siempre deja las cortinas corridas para que en la mañana pueda entrar. No le gusta el frío, cuando se enferma siempre pedirá dulces aunque no pueda comerlos, le gusta el agua de fruta sin mucha azúcar. Cualquier día que tengamos libre lo aprovecha para salir a algún lado. La mayoría del tiempo siempre lo encontraras sonriendo pero en la noches es cuando de verdad se habré. Le gustan las caricias en sus cabellos, le gusta ayudar mucho a la gente y sobre todo, aunque no te lo diga, lo más que aprecia o importante para el son las personas que están con él. Sin duda. - Dije para Lewis aunque mi vista seguía con George.

George tenía lágrimas rodando en sus mejillas, su piel se torno un poco roja y tenía una hermosa sonrisa, me abrazo y gustoso correspondí, me deje soltar un suspiro. Me solté de el y me aleje un poco de el y me incline un poco en dirección a ellos.

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