¡____Harada ha decidido convertirse en una heroína!
Se mudará a una nueva ciudad para asistir a la academia de héroes. Lo que nunca imaginó es que su nuevo vecino sería también su compañero de clases, y además ¡comparten la misma pasión por los vid...
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Me di una ducha rápida y me apresuré a vestirme. Me sequé el cabello con el secador y me teletransporté hacia el living.
Justo en ese momento, los chicos de mi grupo regresaron.
---Los ayudaré.--- Kirishima se apresuró a tomar algunas bolsas.
Me acerqué a Katsuki, quien se notaba fastidiado a simple vista.
---Katsuki, déjame ayudarte.--- el chico no se opuso a mi ayuda. Noté que estaba muy sudado.
---Hace un calor de mierda afuera, no podía cubrirme del sol con este maldito brazo.--- reprochó a su propio brazo y lo intentó mover sin éxito.
---Deja todo esto en la mesa y ve a darte una ducha, aún queda tiempo antes de que Aoyama llegue.--- dije mientras ponía las bolsas que le quite sobre la mesa.
---Eso haré.--- imitó mi acción.
Cuando ya estaba todo sobre la mesa, se acercó repentinamente a mi oído, poniendo su mano sobre mi hombro para que no me alejara.
---Recuerda que necesito ayuda para quitarme la camisa.--- mi cara se volvió roja al instante. Asentí lentamente, sintiendo su respiración muy cerca de mi.
El rubio se separó rápidamente. Entendía que hiciera eso, estábamos en medio del living y todos podían vernos.
Sé que ya todos saben que somos novios, pero eso no quita que intentemos ser discretos. Además, he notado que a Katsuki no le gusta demostrar demasiado afecto en público. Cuando estamos solos, es mucho más tranquilo.
Mientras me tiraba aire con la mano para quitar el calor de mi cara, noté que Mineta estaba revisando las bolsas. Estaba intentando encontrar la botella de vodka que pidió.
De reojo, me di cuenta que mi novio también se dio cuenta de la presencia de Mineta.
---Hey, enano.--- el chico se tensó al escuchar la voz de Katsuki.
---¿Si, Bakugo?--- se giró lentamente hasta tener al rubio de frente.
---No nos cargues tus mierdas a nosotros.--- se acercó a él con el ceño fruncido. ---Si quieres beber, tú mismo compra tus porquerías.--- todos se voltearon a ver la escena.
---¿A qué se refiere, Mineta?--- preguntó Iida. El chico miró a su alrededor notablemente nervioso.
---No le diré a los demás sobre lo que intentó... Después de todo, también tuve curiosidad...--- me dije a mi misma en mi cabeza mientras desviaba la mirada de la escena y me alejaba hasta quedar al lado de las escaleras.
