¡____Harada ha decidido convertirse en una heroína!
Se mudará a una nueva ciudad para asistir a la academia de héroes. Lo que nunca imaginó es que su nuevo vecino sería también su compañero de clases, y además ¡comparten la misma pasión por los vid...
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El segundo día trató sobre combate, estuvimos luchando todo el día. Claramente ella me ganaba siempre, pero recibió varios golpes de mi parte.
---¡DE ESO ESTOY HABLANDO!--- decía cada vez que la golpeaba. ---ESOS GUANTES SON GENIALES.---
Cuando terminó nuestra ronda de entrenamiento, ella me dio un anuncio.
---Prepara un bolso pequeño con tus cosas esenciales, mañana iremos a otro lado.--- dijo sonriendo. Asentí y me fuí a dormir.
Eso pasó ayer. Ahora estoy aquí, mirando una gran montaña.
---Está es una de las montañas más altas de por aquí, arriba hay menos oxígeno de lo normal. Es perfecto poner al límite tu resistencia.--- sonrió mirando hacia arriba. ---Bien, no hay tiempo que perder. Te esperó en la cima.--- corrió y se adentró en el pequeño bosque que cubría la base de la montaña.
---Vaya...--- seguía en el mismo punto, mirando la punta de la montaña.
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Ya llevaba unas horas subiendo. Estaba siguiendo las pisadas que dejó Mirko cuando pasó por aquí. Todo iba bien hasta que noté que el camino se acababa y quedaba escalar.
---Si caigo puedo usar mi Quirk.--- pensé sonriendo, preparándome para escalar.
Ya empezaba a notar la falta de oxígeno. Mis pulmones pedían aire desesperadamente, logrando que me cansara más rápido.
---ESTÁS CERCA, MOCOSA.--- escuché el grito de Mirko, miré hacia arriba y la vi asomada desde la cumbre.
Me dí prisa para llegar hasta arriba. Cuando finalmente llegué, Mirko había preparado una carpa.
---Nos quedaremos aquí hasta mañana.--- sonrió. ---Deja tus cosas y vamos a empezar.---
Empezamos sencillo, con algo de cardio. Luego, hizo que practicara mis posturas otra vez mientras luchaba con un enemigo imaginario. Vi como ella asentía con la cabeza. Repentinamente se unió a mi batalla.
---Mantén tus movimientos.--- dijo y empezó a atacarme. Utilice mis guantes como escudo y esquivé la mayoría de sus ataques. Avancé para atacarla, le hice creer que iría de frente y drásticamente me teletransporté hacia su espalda. Adopté una de las posturas que me habia enseñado y le encesté un golpe. Noté que fue más fuerte de los que daba antes por que vi como ella se movió unos metros debido al impacto.
Sin embargo, al parecer el piso donde estaba Mirko era frágil, ya que se rompió en cuanto ella lo pisó, haciendo que ella cayera al vacío. Rápidamente desactivé uno de mis guantes y me asomé, usé mi teletransportación para ir con ella y luego nos devolví a donde estábamos.
