EPÍLOGO

2.4K 224 36
                                    

LEYLA
6 años después

—Mamá, ¿Podemos ir a almorzar con papá y con Elían después de mis clases de ballet?

Ajusto su trenza con cuidado y me fijo que no vaya a desatarse, para luego envolverla en un moño.

—Claro, cariño—sonrío y miro a mi pequeña Anastasia.

Mi hija de seis años es hermosa.

Su cabello oscuro va atado a la perfección y este resalta las pecas de sus mejillas y el verde de sus ojos.

Simon se ha revertido la vasectomía y finalmente, luego de tanto tiempo, pudimos concebir a dos hermosos gemelos:Elián y Anastasia.

Ambos son lo más preciado que tengo y verlos cada día me llena de una manera inmensa.

—¿Alguien puede decirme quién es esa señorita tan bonita que veo allí?—Simon entra a la habitación, dirigiéndose a Anastasia. Ella sonríe ampliamente y se le abalanza encima para que la cargue entre sus brazos.

—¡Papá!—chilla emocionada—¿Podemos ir a almorzar juntos luego de mis clases? ¿Sí? ¡Por favor!

Simon ríe ante la insistencia y asiente.

—Por supuesto que podemos.—su mirada se posa en mí. Sonríe con esa calidez a la que me he acostumbrado tanto.

—¿Elián está listo? Debo llevarlo a sus clases de pintura antes de las nueve o si no va a enloquecer.

—¿Quién va a enloquecer?—nuestro pequeño pelinegro entra a la habitación. Camina hacia mí y me abraza.—¿nos vamos ya? No quiero llegar tarde y tú debes ir a dar clases de piano a la academia.

—Vaya, nunca pensé que sería tan mandón a tan corta edad—dice Simon.

Yo simplemente sonrío.

Sonrío porque jamás pensé que tendría algo como esto:Una hermosa casa llena de mascotas.
Dos preciosos hijos:Una linda bailarina y otro pequeño artista.

Jamás me imaginé tener al amor de mi vida. Y mucho menos me imaginé que podría llegar a sentirme llena. En paz.

Ahora lo estoy y me siento completa.

Forgive MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora