Siempre ha sido tímido y reservado es por eso que sus hermanos y padres lo cuidaban de sobre manera sobretodo sus guardias por que toda su familia sabía que Jimin al ser el menor de ellos corría más peligro a ser la mira de todos sus enemigos o eso...
Eunwoo y Hyunjin caminaban entre la multitud del aeropuerto, un mar de rostros desconocidos que los observaban con curiosidad. Jimin, completamente cubierto por capas de ropa gruesa y abrigada, se movía entre ellos como una figura fantasmal, su presencia apenas perceptible bajo el camuflaje. La tensión era palpable, cada mirada, cada susurro, cada movimiento, amplificaba la sensación de peligro. Eunwoo sentía el peso de la responsabilidad sobre sus hombros, la protección de Jimin era su principal prioridad.
El nerviosismo de Eunwoo creció cuando divisó a un grupo de policías cerca de la entrada del aeropuerto. Sus ojos se encontraron con los de Hyunjin, quien parecía imperturbable, pero Eunwoo podía sentir la tensión en el ambiente. En ese momento, la voz de Hyunjin resonó en el audífono que Eunwoo llevaba en su oído, una voz suave pero firme, que lo tranquilizó.
- Tranquilo, cha. No nos interrogarán. Ellos saben lo que tienen que hacer. Para eso les pagué - , dijo Hyunjin, su tono seguro y confiado. Las palabras fueron un bálsamo para los nervios de Eunwoo, una inyección de confianza en el plan que habían elaborado.
Con un suspiro de alivio, Eunwoo continuó caminando, siguiendo a Hyunjin a través de la multitud. Pasaron junto a los policías sin ser detectados, como si fueran fantasmas que se deslizaban entre las sombras. La tensión se mantuvo, pero la confianza en Hyunjin le dio la fuerza necesaria para seguir adelante.
Finalmente, llegaron a una camioneta negra estacionada en un lugar discreto. Hyunjin abrió la puerta trasera, y Jimin, por fin libre del pesado camuflaje, se reveló. Su cabello estaba revuelto, su rostro cansado, pero sus ojos brillaban con una mezcla de alivio y determinación. Sus manos descansaban sobre su pequeño vientre de embarazo, un símbolo de la vida que llevaba dentro.
Eunwoo, al ver a Jimin libre, sintió una oleada de emociones. El alivio, la alegría, la preocupación. Se acercó a él, sus ojos llenos de lágrimas. - Jungkook debe saber cuanto antes que estás acá - dijo, su voz entrecortada por la emoción. - Siento que Jihyo planea algo, y que acabará con Jungkook si no le decimos. Jungkook se volverá completamente loco y Jihyo acabará ganando.
Jimin, con la voz baja y cansada, le respondió: - Solo danos unos meses. Sabemos cómo acabar con Jihyo, pero para eso necesitamos tu ayuda - Sus palabras fueron una promesa, una declaración de intenciones. La lucha aún no había terminado, pero con Jimin a salvo y un plan en marcha, la esperanza de un futuro mejor se abría paso entre las sombras. La batalla contra Jihyo estaba cerca de terminar, pero ahora, con Jimin a salvo, tenían una oportunidad de luchar.
- Jihyo me acaba de mandar un mensaje ya sabe que escapaste ...
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