Mi Big Boy - Km Au

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La camioneta negra se deslizó por las calles, recorriendo una ruta familiar para Eunwoo.  Después de una hora de viaje, la mansión se alzó ante ellos, imponente y majestuosa, una estructura de piedra y vidrio que se erguía desafiando al viento helado.  Eunwoo sintió un escalofrío al reconocer el lugar, la mansión vecina a la mansión Park.  Jimin estaría tan cerca de Jungkook, separados solo por una barrera invisible, una distancia que, a pesar de ser mínima, se sentía como un abismo.

Eunwoo no dijo nada, solo observó con sorpresa cómo Hyunjin ayudaba a Jimin, ahora dormido, a bajar de la camioneta.  El cuerpo de Jimin parecía frágil, vulnerable, envuelto en mantas gruesas para protegerlo del frío.  Eunwoo sintió un nudo en la garganta al ver la fragilidad de su amigo, la carga que llevaba sobre sus hombros, la amenaza que aún lo acechaba.

Juntos, Eunwoo y Hyunjin llevaron a Jimin a una habitación amplia y acogedora, con una cama de plumas suaves y ventanas que ofrecían una vista panorámica del jardín.  Lo arroparon con cuidado, protegiéndolo del viento helado que se colaba por las rendijas de las ventanas.  Una vez que Jimin estaba cómodo, ambos salieron de la habitación, dejando al joven a su descanso.

Se dirigieron a la sala, un espacio amplio y elegante, con sofás de cuero y una chimenea que crepitaba con un fuego cálido.  Se sentaron uno frente al otro, comenzando una charla amena para conocerse mejor.  Hyunjin, con su sonrisa cálida y su mirada penetrante, le habló de su vida, de sus sueños, de sus planes.  Eunwoo, cautivado por la energía y la inteligencia de Hyunjin, le contó sobre su amistad con Jungkook y Jimin, sobre la situación actual y sobre la amenaza que los acechaba.

Hyunjin escuchó con atención, su rostro serio pero comprensivo.  Cuando Eunwoo terminó de hablar, Hyunjin le reveló su plan, un plan audaz y arriesgado, que dependía de la colaboración de ambos.  Eunwoo escuchó con interés, su mente trabajando a toda velocidad, analizando cada detalle.  El plan le pareció brillante, una estrategia inteligente que podría darles la ventaja que necesitaban.

Una vez que terminaron de hablar, Eunwoo se despidió de Hyunjin, agradeciéndole su ayuda y su apoyo.  Salió de la mansión, con un corazón lleno de esperanza y un poco de miedo, y se dirigió a su casa, al lado de la mansión Park.

Al entrar en su casa, Eunwoo sintió un escalofrío recorrer su cuerpo.  La atmósfera era extraña, cargada de tensión.  En el pasillo, vio a Jungkook, su rostro pálido y sus ojos rojos, apuntando con un arma hacia su cabeza.  Jihyo, con una sonrisa psicopática, lo sostenía del hombro, su mirada fría y amenazante.  Eunwoo se congeló, su mente tratando de procesar la escena que se desarrollaba ante sus ojos.  Algo había pasado, algo terrible, algo que había transformado a Jungkook en un ser desconocido.  La batalla por la verdad y la justicia se había intensificado, y Eunwoo se encontraba en medio de una tormenta que amenazaba con destruirlo todo.