[FANFIC/AU] Prometo Hacer Las Cosas Bien: ACTO II (Jinx)

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Dan se levantó temprano, como siempre.

La luz matutina apenas comenzaba a filtrarse por las ventanas mientras él se dirigía a la cocina, ya vestido con ropa cómoda y listo para comenzar su día. Sabía que Jaekyung estaría regresando pronto de su trote matutino, y quería asegurarse de que todo estuviera listo para su alimentación. 

Sobre la encimera de la cocina, Dan tenía una lista detallada de comidas y porciones, diseñada meticulosamente junto con Alex y un nutriólogo externo. Sabía lo crucial que era para Jaekyung mantener una dieta equilibrada durante esta fase de recuperación. 

— Bien, hora de comenzar — murmuró para sí mismo mientras revisaba los ingredientes. 

Mientras cocinaba, el aroma de los alimentos comenzó a llenar el departamento. Dan se movía con precisión, picando, sazonando y organizando las comidas en recipientes etiquetados. 

Poco después, escuchó la puerta abrirse. Jaekyung regresaba de su trote, su rostro ligeramente sudoroso y su respiración algo acelerada. 

— Huele rico — comentó Jaekyung mientras se dirigía a la cocina, secándose la frente con una toalla. 

— Es tu desayuno — respondió Dan, sin apartar la vista de la sartén... Luego señaló los recipientes ordenados en la encimera — Y también tus comidas para el resto del día. 

Jaekyung se acercó y observó los recipientes con una sonrisa. 

— ¿Te has dado cuenta de que haces más por mí que cualquiera? — preguntó, su tono lleno de admiración. 

Dan solo sonrió de forma ladina, aunque no pudo evitar sonrojarse un poco. 

— Es parte de mi trabajo Jae... Y aparte, quiero asegurarme de que estés en tu mejor forma para cuando regreses al octágono. 

Jaekyung se acercó, rodeando la cintura de Dan con sus brazos desde atrás. 

— Sabes que eres más que eso para mí, ¿verdad? — dijo suavemente. 

Dan se detuvo por un momento, sonriendo mientras seguía cocinando. 

— Lo sé... Ahora ve a ducharte antes de que termines todo sudado en la mesa. 

Jaekyung soltó una carcajada y, después de besar la mejilla de Dan, se dirigió al baño. Dan, por su parte, se permitió disfrutar de ese momento antes de volver a enfocarse en su tarea. Todo por ver a Jaekyung triunfar de nuevo.

— Me gustaría que viviesemos juntos... Me acostumbré mucho a su presencia.

Tras el desayuno, Dan estaba ahora en su habitación, ajustándose los pantalones de su uniforme de trabajo, una pijama quirúrgica color vino, frente al espejo. Había doblado cuidadosamente la filipina sobre la cama, listo para ponérsela, pero antes de que pudiera hacerlo, sintió unos brazos musculosos rodeándolo desde atrás.

Se sobresaltó al principio, pero al sentir el calor familiar y la textura tersa de la piel contra su espalda desnuda, supo que era Jaekyung. 

— ¿Qué estás haciendo Jae? — preguntó Dan con un suspiro, viendo la imagen de ambos en el espejo. 

Jaekyung, sin camisa y solo con unos pants deportivos, apoyó su barbilla en el hombro de Dan, dejándose caer ligeramente sobre él. 

— Tengo frío — murmuró, con voz adormilada — Y tú estás calentito.

Dan rodó los ojos, aunque no pudo evitar sonreír. Sabía que no era verdad. 

— Si tienes frío, podrías ponerte una playera, sé que te gusta presumirme tu físico de dios griego pero no quiero que te enfermes.