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Más temprano ese sábado por la mañana, ambos tomaron el tren rápido a Liverpool y luego se dirigieron a la casa de Jaekyung para su sesión semanal de fisioterapia allí.

Esta vez, Dan incorporó ejercicios tanto en la piscina como en el gimnasio de la casa... Jaekyung, desde que comenzó sus sesiones con Dan, estaba mostrando una mejora asombrosa, pero aún necesitaba volver a entrenar sus músculos para que con las mancuernas agarrase fuerzas.

Dan, después de terminar el masaje en la casa de Jaekyung, se levantó del sofá y empezó a recoger sus cosas. Aunque disfrutaba mucho las sesiones con Jaekyung, También tiene otros pacientes que atender, esta vez siendo en consultas en línea.

Jaekyung, notando que Dan estaba a punto de irse, lo miró con una sonrisa.

— ¿Por qué no trabajas aquí un rato? — dijo Jaekyung, señalando hacia su oficina  — Mientras lo haces yo me ducharé

Dan lo miró, un poco sorprendido por la propuesta. No había pensado en quedarse más tiempo, pero la idea de trabajar en un ambiente tranquilo, en lugar de apresurarse a casa, parecía tentadora. Además, la oficina de Jaekyung era espaciosa y moderna, y seguramente sería un buen lugar para concentrarse.

Dan se dejó guiar hacia la oficina, donde instaló su laptop y se acomodó en el escritorio.

Jaekyung lo dejó trabajando mientras se dirigía al baño para ducharse. Aunque había algo familiar en el espacio elegante de Jaekyung, Dan se sentía extrañamente cómodo, como si este fuera su segundo hogar.

Después de la ducha, Jaekyung, sabiendo perfectamente cómo provocar a Dan, decidió pasearse por la casa sin camiseta, algo que solía hacer con total naturalidad.

Esta vez, además, llevaba sus gafas de descanso, lo que le daba un aire más relajado, pero también atractivo de una manera más sutil. Después de asegurarse de que no había ningún paparazzi cerca, bajó las persianas de las ventanas, asegurando que nadie más estuviera observando desde el exterior.

También cociné algo para ambos mientras Dan estaba trabajando, Jaekyung era un buen cocinero, pero nunca se acerca al nivel de Dan, la forma en que Dan cocinaba la carne era increíble, dejándola jugosa y perfectamente sazonada.

Durante el transcurso del día, Dan seguía concentrado en su videollamada con su paciente de esa hora, ajustando los últimos detalles de sus ejercicios, dejando a Dan más tranquilo.

Parecía aliviado, pero también agotado por la presión de los últimos días. Al terminar la llamada, se quedó viendo la pantalla con una leve sonrisa, satisfecho con el resultado.

En ese momento, Jaekyung apareció con dos tazas de café, una para él y otra para Dan. Al acercarse, rozó intencionalmente las manos de Dan al entregarle la taza, un gesto sutil pero cargado de intención.

Como era de esperarse, Dan sintió cómo el calor le subía al rostro al contacto, y el ligero sonrojo que se apoderó de sus mejillas fue la confirmación que Jaekyung buscaba.

— Gracias — dijo Dan, tomando un sorbo de su café para disimular la incomodidad que sentía al ver a Jaekyung paseándose con tanta confianza.

Jaekyung, sin perder la oportunidad, sonrió mientras tomaba asiento cerca de él.

— Bueno... me gustaría que te quedaras aquí esta noche... quiero llevarte a algún lugar. — dijo Jaekyung, mañana era la mejor fecha para hacer el picnic ya que iba a estar un poco soleado.

Dan, a pesar de estar tentado, dudó por un momento. Entre el cansancio y los compromisos que tenía, no estaba seguro si sería buena idea. Pero al ver la mirada insistente de Jaekyung, y sintiendo una creciente necesidad de desconectar de todo, finalmente asintió.

[FANFIC/AU] Prometo Hacer Las Cosas Bien: ACTO II (Jinx)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora