Capítulo 29

529 40 1
                                    

Dallas 

Por primera vez lo sentí. Sentí mi corazón acelerarse, sentí la respiración nerviosa y agitada, sentí el deseo de tenerla cerca, sentí las tremendas ganas de verla y besarla. Sentí las ganas de estar aquí, con ella.

Nunca me he puesto nervioso al quitarle la ropa a una mujer, no me había sentido decepcionado al ver a una llorar por mí y nunca antes había vuelto al mismo lugar tantas veces. Nunca me había sentido tan atraído por alguien. Es la primera vez que alguien me gusta de esta forma. 

No tengo idea de qué me pasa, no sé quién soy cuando estoy cerca de esta chica. Incluso tengo miedo. Miedo de mí mismo y de lo cabrón que puedo llegar a ser. 

 - Esto es extraño.- Admite sonriente al separarnos.

 - ¿Qué? - Pregunto curioso.

 - Esto, no sé, se supone que no nos gustamos y aquí estamos.- Esas palabras impactan un poco en mí y frunzo el ceño.

- ¿Cómo? Ya te lo he dicho, me gustas, Jess.- Busco sus ojos.

En medio de un largo silencio, por fin habla.

- Ojalá pudieras ver con mis ojos y darte cuenta de todo el trabajo que hago para no enamorarme de ti.

 - Eres hermosa.- Cambio de tema sin saber cómo responder a eso mientras rozo con mi pulgar cada detalle de su rostro. 

 - Quédate.- Me pide de pronto. 

- No, Jess.- La tomo de la cintura y la acerco más a mí. Se sonroja y se acurruca en mi pecho.

 - Por favor.- Me ruega.

 - No empieces.

No quiero discutir con ella, estoy bien así como estamos ahora. 

 - Pero no quiero que te vayas, quiero que te quedes conmigo.- Vuelve a pedir y exploto. 

La paciencia no es mi fuerte. 

 - Jessica he dicho que no- hago espacio entre nosotros abruptamente - ¿por qué siempre haces todo tan difícil?

- ¿De qué estás hablando?- se levanta un poco apoyándose en uno de sus brazos.

- Olvídalo.

- No, Dallas. Dime.- Está enfadada.

 - Ya me voy.- Me levanto de la cama y recojo mis jeans del piso para ponérmelos.

 - ¡Ya basta! ¿por qué haces eso?

- ¿De qué hablas?

- Si sólo querías acostarte conmigo entonces, ¿por qué vuelves a mí? ¡ya conseguiste lo que quieres!

 - Yo no... ¡no lo sé, Jessica!

 - Puedes irte.- la miro tranquilo pero no lo estoy. - ¡ya vete!

 - Tal vez te necesitaba para despertar el sentimiento que una vez murió en mí.- Susurro. 

Me pongo la camiseta y salgo de la habitación dejándola de pie frente a su cama. 

 - Espera.- Volteo al escuchar su voz al final del pasillo. 

 Quisiera ser otra persona, quisiera cambiar, quisiera dejar de ser la basura que soy. Quisiera poder ser diferente. Tal vez más amable, más honesto, más sociable, menos mujeriego y mejor persona. 

¿A Jessica le gustaría de la misma forma si fuera diferente? 

Giro el pomo de la puerta y salgo. Camino un poco hasta llegar al ascensor y presiono el botón para bajar.

Inesperadamente EnamoradosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora