Capitulo 32

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Harry mete una de sus manos por debajo de mi camiseta y traza pequeños circulos en mi cadera con sus dedos.
Mis manos viajan a su camiseta, que a los pocos segundos, ya no está en su cuerpo. Me separo de sus labios, solo para poder observar su torso, lleno de tatuajes, que tanto me gustan.
Paso la mano por los dos pájaros que tiene en las cláviculas y voy bajando hasta llegar hasta la gran mariposa que tiene en el estómago.

-Si sigues bajando voy a terminar antes de empezar nena- me dice riéndose.

Yo le acompaño y me acerco a él para besarlo de nuevo. Harry me corresponde sin pensarlo dos veces.
Pronto sus pantalones, mis pantalones y mi camiseta, están en algún lugar de la habitación.
La verdad ahora mismo no me importa nada, solo me importa él.
El hombre de mi vida, el hombre que me hizo la mujer más feliz del mundo al darme a lo más bonito que tengo que es mi hija, el hombre con el que estoy a punto de hacer el amor.

-Te amo Ellie- me dice mordiéndome la oreja.
-Te amo Harry- le contesto en un susurro.

Después de varios minutos besandonos y riendonos, estamos los dos completamente desnudos, mirándonos a los ojos.

-¿Lista?- me pregunto sonriendo.

Asiento con una sonrisa. Él entra en mi con mucha facilidad y nos perdemos el uno en el otro.

{...}

Abro los ojos gracias a la luz que entra por la ventana. Me siento en la cama y cuando veo toda mi ropa tirada por el suelo de la habitación del hotel, es cuando todo me golpea.
Anoche Harry y yo lo hicimos, y fue increible.
Significó muchisimo para mí, fue como un pequeño flashback hacia nuestra primera vez.
Fue todo tan romántico, tan especial... Que es imposible describirlo solo con palabras.

-Buenos dias amor- me dice mi chico entrando por la puerta con una bandeja con comida.
-Buenos dias- le contesto con una sonrisa- ¿Donde está Rachel?
-Esta con Zayn y Perrie, que acaba de llegar. Nos vamos a Disney.
-Genial. Voy a ducharme y nos vamos.
-¿No quieres desayunar?- niego con la cabeza y él tira de mi brazo para que me siente en sus piernas. Menos mal que me he puesto antes la ropa interior- Me gusto mucho lo de anoche.
-Lo dices como si hubiera sido la primera vez- le digo riendome.
-Para mí fue como nuestra primera vez, amor. Solo tú y yo.

Yo le sonrío y le beso en los labios. Es imposible no amarle.

-Gracias- le digo de repente.
-¿Por qué?
-Por todo. Por darme otra oportunidad y sobretodo por darme a Rachel.
-Te tendría que dar yo las gracias entonces por hacerme el hombre mas feliz del mundo.
-Eres el mejor.

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